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“Este escándalo tiene un increíble poder desmoralizador para el país”, Jaime Luque, Bucaramanga.

14 de marzo de 2015

Encanallamiento
Excelente portada de SEMANA llamando a la toma de conciencia nacional (edición n.º 1714). Vale recordar que caímos ya, como sociedad, en el “encanallamiento”: “Aceptación de una irregularidad como estado habitual” (Ortega y Gasset, La rebelión de las masas).

José Ignacio Sanclemente Villalón
Bogotá


Justicia mártir
Si la justicia tocó fondo (SEMANA n.º 1714) es porque el proceso ha sido largo, y culpables son los congresistas y partidos políticos, durante más de medio siglo. Vamos a rescatarla, a limpiarla, a purificarla, a defenderla, porque sin justicia no podemos vivir.

La justicia es la representación de Dios en las naciones, para juzgar con rectitud de espíritu, las dificultades humanas y los delitos. Como atributo del Creador, encomienda a hombres cabales, rectos, la responsabilidad de dar a cada quien lo que le pertenece. La justicia no puede mancharse, contaminarse de política, ni dejarse corromper por el dinero.

En Colombia la Justicia ha sido el poder mártir en todas sus jerarquías. La violencia política y el narcotráfico la pusieron de rodillas, la humillaron. El dinero o la vida trilló el camino de sus sacrificios, y muchos jueces rindieron sus vidas impolutas en aras del honor de la justicia, sin que la sociedad se estremeciera ante su desamparo. Ahora sí, Colombia, a despertar, a ser dignos ciudadanos y ciudadanas. Universidades, a formar profesionales virtuosos, honestos, de honor, de méritos para ser miembros del poder moral de la democracia.

Isaac Vargas Córdoba
Florencia


De José Guerra de la Espriella

Solicito rectifique lo dicho por María J. Duzán (SEMANA n.º 1714) contra el suscrito.
1. La ONU falló a mi favor ordenando al Estado colombiano un recurso efectivo (tutela) y una indemnización por haber violado el debido proceso en la justicia sin rostro 1996. 2. Por reparto, la tutela correspondió al H. M. Humberto Sierra Porto, quien dejó consignada ponencia favorable a mis pretensiones conforme al DIH. 3. Al concluir su periodo lo reemplaza el H. M. Alberto Rojas, que acoge en similares términos la ponencia de su antecesor Sierra Porto. 4. Públicamente desde el momento del fallo renuncié a demandar o reclamar del Estado colombiano una indemnización económica, jamás ha estado en mi ánimo solicitar un solo peso del erario y ¡así lo reitero!, a pesar de tener el derecho. 5. En varias ocasiones recusé al exmagistrado Pinilla, hoy catón de la moral pública, quien prevaricó al no declararse impedido. Los tratados y pactos internacionales son para cumplirse pacta sunt servanda, erga omnes, no puede ser que se cumplen unos fallos cuando favorecen a los amigos de los medios y se orquestan en contra otros cuando son sus malquerientes.

José Guerra de la Espriella
Bogotá


Los mejores epítetos
Enérgica pero por demás sincera, oportuna y clara resulta la opinión plasmada por María Jimena Duzán en la edición n.º 1714. Si Colombia anhela recobrar la dignidad robada por tantos miserables, esta es la forma de expresión que debe seguirse cultivando, pues no caben mejores epítetos contra quienes sienten tener entre sus bolsillos, aparte de tantos recursos monetarios, la justicia, el honor, la verdad y el futuro de los que lloramos de incredulidad ante el nefasto panorama que ellos representan. La verdad no es ofensa.

Mario Zarama Concha
Manizales


Quedó corta
Qué maravilla esta idea de mencionar  a las mujeres que se destacan en Colombia (SEMANA n.º 1714). La selección quedó corta, pues faltaron las científicas, las artistas (cantantes, pintoras, etcétera) y desde luego la pléyade de mujeres en las letras. Ya que resolvieron sacarlas del ostracismo, sería bueno que en cada número de SEMANA publicaran una página con  el perfil –vida y obra– de tantas mujeres que son ejemplo para la sociedad. Sin su contribución el altar de la patria estaría desajustado. Me asalta la duda, si ¿la primera senadora fue Esmeralda Arboleda? Pétalos.

Flor Romero
Fundadora de Uneda (Unión de Escritores de América)
Bogotá


Identidad trocada
En el artículo ‘Una prueba por el honor’, en la edición n.º 1714, sobre el nadador Omar Andrés Pinzón, el que sale en la foto de ese artículo no es el señor Pinzón. Se trata de mi hijo Mateo de Angulo Velasco, también nadador de la Selección Colombia; la foto fue tomada en Veracruz, México, durante los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe en el mes de noviembre de 2014. Comedidamente les solicito aclarar este lapsus fotográfico ante la opinión pública en un próximo número de su revista.

Eduardo de Angulo Iragorri
Cali

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