Cartas

¿Ruedas sueltas?

En su edición n.° 1720, en el artículo ‘¿Por qué’?, referente al bárbaro ataque de las Farc a nuestros militares en el Cauca, la única explicación posible es que no actúan como una unidad y tengan algunas o muchas ruedas sueltas. Esto por supuesto no va a ser aceptado por ellos, pero el presidente Santos debe pensar seriamente en esta posibilidad, pues en caso de volver a suspender los bombardeos o tratar de desescalar el conflicto, pondría en riesgo a nuestros soldados y policías.

Las Farc son expertas en dilatar este tipo de diálogos y en estos 30 meses han pasado de ser un grupo que venía recibiendo francos golpes en su estructura a un grupo con cada vez mayores exigencias, por lo que el gobierno no debe caer en su juego. Este grupo, después de 30 meses de negociación, debe saber a qué pueden aspirar o en qué pueden ceder, es hora de colocar todas las cartas sobre la mesa, principalmente en  lo referente a entrega de armas, entrega de desaparecidos vivos o muertos e indemnización de las víctimas o sus familiares con dinero y tierras, pues el cuento de que el Estado es el culpable no lo vamos a aceptar. Es una situación muy compleja para el presidente Santos, lo ha intentado con toda la pasión y si de parte de las Farc no están dispuestas a aceptar sus errores y cambiar su rumbo, le debe quedar al presidente la gran satisfacción del deber cumplido.

Henry Medina Muñoz
Bogotá

No a la ciudadanía

Importante y de fondo la pregunta de la portada de la edición n.° 1270 de SEMANA. Normalmente, y no requiere mucho análisis, quien lo hace cree que lo puede hacer.  En este caso los narcoterroristas midieron bien al gobierno, pero no a la ciudadanía. Las rechiflas de antes y las de después muestran el sentir de los colombianos.

Álvaro Cadavid
Bogotá

¿El poder para qué?

La portada de SEMANA edición n.° 1720 pregunta: ¿Por qué? Por algo que se llama poder. Porque en estas hermosas tierras brotó como maleza maldita un grupo de sanguinarios bandoleros, que camuflados de guerrilla política han inundado de sangre nuestra patria y ellos consideran estos actos como muestras de poder. Porque están negociando con un gobierno cuyo único argumento para seguir en el poder es el tema de la paz. Porque fuera de sanguinarios son brutos y actúan en consecuencia. La extrema derecha los pone a trabajar para ellos y para este otro grupo de derecha, la guerra es la única fórmula que tienen para volver al poder. Y todos ellos, doctor Echandía, sí añoran el poder. ¿Para qué?... Más bien descanse en paz, maestro.

Gilberto Silva Ospina
Ibagué

Corrupción en la raíz

La lectura del artículo ‘¿Justicia o persecución?’ de la más reciente edición de la revista sobre la condena de los exministros del primer gobierno de Álvaro Uribe, me ha suscitado las siguientes reflexiones:

1. Que la reelección de Uribe fue ilegal y carente de toda legitimidad. En el artículo, tristemente con razón se anota, que en Colombia todos los ministros del Interior, mejor sería señalar todos los gobiernos, desde la creación de la República han logrado mayorías en el Congreso, gobernabilidad, con prebendas, a punta de puestos, de burocracia, y de contratos, con el presupuesto. A los ciudadanos de bien de este país nos produce tristeza y una gran frustración porque eso confirma que la corrupción que impera se origina en la propia raíz de nuestro sistema político.

2. ¿Se habrían conocido esos hechos y habrían dado lugar a una condena si el señor Álvaro Uribe hubiera logrado elegir un fiscal general de su entera confianza? Con seguridad, no. Eso pone de presente la importancia para nuestra débil institucionalidad de garantizar que el fiscal general de la Nación, y ojalá las cabezas de los demás órganos de control, sean personas realmente independientes del gobierno de turno.

3. ¿Qué explicación puede tener el que por los mismos hechos la sala penal de la Corte Suprema de Justicia haya condenado a los exministros y el procurador general de la Nación los haya absuelto disciplinariamente?

Segismundo Méndez Méndez
Bogotá

País de contrastes

Sobre su portada ‘¿Por qué?’ (SEMANA n.° 1720). Cuando el secuestro del general del Ejército de Colombia ocurrió en el Chocó dio pie hasta para parar los diálogos en Cuba, se llamó a los negociadores a venir a Colombia ya que esto era imperdonable y las Farc tenían que liberarlo para poder continuar con el proceso de paz. Este secuestro, aunque con muchas dudas por la forma como ocurrió, creó la solidaridad de los colombianos que rodearon y apoyaron  al Ejército.

Ahora me asalta una gran duda, ¿por qué no causa el mismo estupor la muerte de los 11 soldados? Si el gobierno ha sido serio en sus posiciones de paz y ordena no más bombardeos, ¿por qué las Farc siguen empeñadas en matar a nuestros jóvenes? Estamos dialogando solo para que estos hechos no ocurran más y para detener esta guerra absurda que nos carcome hace tantos años.

Luis Hernán Tabares Agudelo
Riohacha

Oxigenar la mente

Es determinante estar actualizado de la realidad. En la edición  n.° 1720 de su variada y profesional  revista de actualidad se resalta que el cerebro es un órgano fundamental para la supervivencia. Gracias a su plasticidad puede seguir funcionando efectivamente a pesar del terrible envejecimiento al que nuestra cultura le huye. Si bien la velocidad puede disminuir, pero es real que sí funciona la sinapsis.

La prevención de daños neuronales, con enfermedad de Alzheimer, entre otros, es mediante actividades sanas como oxigenar la mente con ejercicios más que todo de tipo aeróbico, unido a llevar una dieta sana y completa y sobre todo utilizar la mente para pensar y crear, no solo para repetir; pueden mejorar la calidad de vida y preservar la especie que el mismo científico Charles Darwin resumía en órgano que no se usa se atrofia. Estamos a tiempo de desmitificar creencias erradas de loros viejos.

Diego Casabianca Escallón
Bogotá

Gran tradición cultural

En la edición n.° 1719, la revista nos entrega una publicación muy interesante ‘Avanza Córdoba’, en ella se puede apreciar el avance notorio que ha adquirido el departamento, que años atrás no se podía imaginar ocurriera. Es para mí muy grato tener esta información ya que conozco el departamento muy de cerca, pero encuentro que no se hace referencia a las comunidades indígenas zenúes, las cuales tienen una gran tradición cultural, organizativa, artística, económica y lo más importante, su lengua, la cual al parecer puede estar ad portas de extinguirse.

Era el momento propicio para dedicarle a esta comunidad un buen espacio y con ello contribuir a tocar puertas en los Ministerios de Cultura, Educación y del Interior, para evitar que ello llegue a ocurrir, ya que la tradición de este pueblo es muy bella y de ello ya han hecho gala escritores como  David Sánchez Juliao.

Edgar A. Castelblanco Zapata
Medellín