De Alfonso Gómez Méndez

En la edición #1.128 en un artículo político, bajo el título 'El club de los ex' se afirma lo siguiente: "En esta nueva dinámica Samper se ha alejado de personas que le cuidaron la espalda en el pasado. Piedad Córdoba y el ex fiscal Alfonso Gómez Méndez son algunos de ellos". Hace poco tiempo, en otro artículo cargado de malintencionadas insinuaciones, la revista señalaba como uno de los casos de procesos con sesgo político supuestamente adelantados durante mi gestión y que terminaron con absolución el del ex ministro Botero. La justicia acaba de condenarlo. Es evidente que afirmar que un ex fiscal general le "cuidó la espalda" a un presidente supone una implícita acusación de prevaricato que no puedo dejar pasar. El editor, en el caso del ex presidente Samper, envía un falso mensaje a sus lectores. Olvida deliberadamente dos hechos: 1o. La Fiscalía General no es la entidad competente para investigar y juzgar al Presidente de la República. Es el Congreso el que de manera exclusiva puede investigar, juzgar y condenar o absolver al Jefe del Estado; y 2o. La decisión del Congreso, sobre preclusión del caso del presidente Samper, por competencia constitucional, se produjo el 12 de junio de 1996, prácticamente un año antes de mi posesión como Fiscal General. Ese es el fallo que en derecho, todos los colombianos deberíamos respetar. Como congresista que fui, he sido amigo del ex presidente Samper y lo acompañé en su campaña como lo hizo mi antecesor Alfonso Valdivieso. Pero eso nada tiene que ver con "cuidar la espalda" cuando se han cumplido funciones judiciales.