LOS CARGOS Y SUS DUEÑOS

En el año 96 publicó SEMANA una entrevista al líder guerrillero Alfonso Cano quien recordaba cómo para la Constituyente del 90 votaron 2.800.000 ciudadanos y cómo el gobierno y los partidos creían que la democracia se había salvado... y todos tan tranquilos. Pero esta cifra sólo representaba a la tercera parte del país puesto que más del 65 por ciento de los colombianos no votaron. Es decir ese tan alto porcentaje no se matriculó liberal ni conservador, ni rojo ni azul. Ahora cuando de nuevo se empieza a agitar el tema de las elecciones es fundamental, si esperamos que este país cambie, motivar a esa gran masa de colombianos demostrándoles y convenciéndolos de que este su país no está escriturado a los liberales ni a los conservadores. Hiere y ofende observar que los cargos públicos desde el corregimiento más humilde y retirado ya tiene dueños: familiar hasta tercer grado de senador, diputado, concejal, ministro o líder político vivo o muerto sin olvidar los familiares de diplomáticos, de ex alcaldes y ex gobernadores. Cuando en nuestro país, con tanta desocupación, estén al alcance de los abstencionistas los cargos públicos entonces sí la subversión y la guerrilla empezarán a perder terreno.
Jaime Betancourt O.
Cali