A mitad de camino

Como siempre, frentero, directo y acertado Antonio Caballero con sus excelentes artículos en la revista (SEMANA #1.225) . En efecto, se salvó la patria por ahora; son muchas las conjeturas, todas negativas, sobre las consecuencias de una decisión diferente sobre la reelección. Desde el golpe de Estado hasta el desmadre de las instituciones, etc. El presidente Uribe, si mal no estoy, fue elegido para un período de cuatro años como lo ordena la Constitución; los colombianos votaron (yo no voté por él) para que desarrollara sus programas belicistas contra la subversión y pacificara el país. Es de muy mal gusto que a mitad de camino y aprovechando el inmenso poder disuasivo que tiene el manejo del presupuesto de la Nación, le dé por cambiar las reglas del juego. Finalmente, y tratándose de un régimen abusivo y tramposo, no estoy de acuerdo con el señor Caballero; tendremos nuevamente Uribe por mucho tiempo sin que eso signifique la pacificación del país: las causas de la guerra siguen vivas; nos seguiremos matando entre hermanos, seguirán muriendo niños de hambre en los cinturones de miseria de nuestras ciudades, se seguirán cerrando hospitales y la falta de oportunidades para nuestra valiosa juventud seguirá alimentando a los grupos que aglutinan el inconformismo y la desesperanza.