SI BIEN ES CIERTO

La circunstancia de no haber aceptado pronunciarme sobre el tema de la espada de Bolívar, cuando fui requerido por el periodista de SEMANA, no justifica el que todo lo que allí aparece referido a mi padre carezca por completo de veracidad, al extremo de que ni siquiera acierta en la fecha de su muerte.Viví con él en la casa de la 16A desde 1971 hasta su muerte y me consta que jamás tuvo nada que ver ni con el M-19 ni con la espada de Bolívar. En lo que hace referencia a mi persona, si bien es cierto que los esbirros del general Miguel Vega Uribe, de tan ingrata recordación, me llevaron a su despacho del cantón norte para una declaración "libre y espontánea", jamás he sido detenido ni acusado de delito alguno. El episodio en cuestión dio pie para que se pronunciaran sobre él periodistas como Daniel Samper, Iader Giraldo y Lukas Caballero (Klim) y mi hermano Hjalmar. Boris de Greiff Bogotá