EDICIÓN IMPRESA

Difícil experiencia

23 de mayo de 2015

Luis Carlos Villegas, el recién nombrado ministro de Defensa, vivió en carne propia los horrores del conflicto armado. En 1999, mientras ejercía como presidente de la Andi, su hija Juliana fue secuestrada. Tenía entonces 17 años y era una estudiante de Ciencia Política de la Universidad Javeriana. Por orden de Romaña, un día saliendo de clase varios hombres armados vestidos de civil la forzaron a entrar a un carro. La liberación de Juliana se convirtió en uno de los principales temas de la mesa de negociación entre las FARC y el gobierno de Andrés Pastrana durante la época del Caguán. La joven duró secuestrada tres meses y fue liberada en un intercambio humanitario sin pago económico.