EL MEMORIAL

2 de noviembre de 1992

La explicación del abogado Santiago Uribe de cómo esos casetes llegaron a sus manos fue la de que la propia juez, a través de su escolta, se los había hecho llegar, ya que, según él, eran amigos. Nadie ha podido establecer si eran amigos o no. Se sabe que ambos se graduaron en la Universidad de Antioquia con cuatro años de diferencia y que efectivamente se conocían, pues en la agenda del abogado apareció una anotación que decía:"Memorial a Marry. Caso Guillermo Cano". Marry, según las autoridades, era la juez sin rostro asesinada en Medellín.