Encuentro en libertad

Entre las múltiples anécdotas que el canciller Fernando Araújo ha contado sobre su cautiverio, llama la atención una muy particular. Cuando una joven guerrillera que hacía parte del grupo que lo vigilaba, quedó embarazada de su novio, le hicieron un consejo de guerra cuya decisión consistió en que entregara su bebé al nacer. Para evitar separarse de su hijo, ella se fugó. Semanas después de que Araújo regresara de su secuestro, recibió la sorpresiva visita de la joven, quien se reinsertó y está rehaciendo su vida al lado del niño. El encuentro fue emocionante.