Explicación de un absurdo

5 de septiembre de 2009

El debate sobre si la consulta conservadora se hace o no el 27 de septiembre no sólo es un pulso político entre Andrés Felipe Arias y Noemí Sanín, sino que tiene implicaciones económicas enormes para los candidatos. Muchos de ellos se endeudaron confiando en que pagarían esas obligaciones con la plata que les llegaría por la reposición de votos en la consulta. Existe una norma, según la cual, los candidatos que obtienen más del 5 por ciento de la votación de su partido reciben del gobierno un reembolso de 4.000 pesos por cada voto. Esto significa ni más ni menos que un candidato como Uribito, que llegó a pensar que podía sacar medio millón de votos, podría llegar a recibir del Estado alrededor de 2.000 millones de pesos. Por eso es que para Arias se justifica la consulta interna aunque esta no tenga ningún sentido, puesto que él ya manifestó que aunque gane apoyaría la reelección de Uribe.