GABO LESIONADO

15 de agosto de 1988

El accidente que sufrió Gabriel García Márquez recientemente en Caracas, dejó en el novelista más lesiones de las que se creyó inicialmente. No sólo se partió cuatro costillas, una de las cuales le afectó la pleura, sino que sufrió un fuerte golpe en el bazo. La clavícula izquierda quedó dislocada y el brazo derecho sufrió una distensión muscular de la cual ahora, después de dos meses, le ha quedado una secuela: la mano derecha dormida. Esto lo ha obligado no solamente a recibir intensivo tratamiento fisioterapéutico para recobrar la fuerza de la mano, sino que ha tenido que aprender a comer y a escribir con la mano izquierda. A pesar de todas estas lesiones, Gabo considera que el accidente fue redentor. Según él, lo redimió de estar corriendo de aquí para allá para cumplir compromisos. El Nobel acaba de suspender todo los viajes, citas y entrevistas que tenia previstos, y además canceló la actividad que mas tiempo le había copado en los últimos meses: los cursos de cine en La Habana. "Voy a empezar a vivir mi vida", dijo Gabo a un amigo en su casa de México, donde ahora piensa vivir la mayor parte del tiempo, dedicado a lo que más le gusta: escribir. Sólo en el mes de abril, decidirá si vuelve a dictar las clases de guiones cinematográficos en Cuba, o a aceptar cualquier otro compromiso.