A GRITO ABIERTO

1 de marzo de 1993

El fiscal De Greiff estaba disgustado con la espectacularidad con que se desarrolló el operativo contra los concejales.
Había dejado órdenes escritas de que debería ser ejecutado con "altura" y "discreción". Según sus subalternos, la razón por la cual la detención terminó siendo un show fue porque cuando los uniformados le pidieron a la presidenta del Concejo, María Victoria Vargas, que llamara a los concejales a su oficina, comenzó a gritar por el teléfono interno: "Los van a coger a todos ".