La bomba de Avianca

5 de febrero de 1990

Dentro de la investigación sobre la bomba de Avianca se han enviado fragmentos de restos humanos a un laboratorio especializado en los Estados Unidos. Se trata de fragmentos de los cuerpos de las personas que estaban más cerca del sitio donde explotó la bomba. El objeto es que, a través de una sofisticada metodologia que solo se practica en el pais del Norte, se puedan detectar las huellas que la explosión dejó en la piel y el organismo de las víctimas, al igual que la velocidad y la temperatura del impacto explosivo. Estos datos permitirán determinar no sólo la naturaleza exacta del explosivo, sino las condiciones exactas de la explosión.