Levantando las ruinas

9 de septiembre de 2006

El gobierno está decidiendo qué se va a hacer con la legendaria hacienda Nápoles, que fue la sede del imperio de Pablo Escobar. La propiedad tiene 2.000 hectáreas de tierras ganaderas y será dividida en varias secciones. Una parte será destinada a la construcción de una cárcel para 1.200 reclusos. También hay planes para hacer un museo del crimen y un parque temático con objetos que fueron de Escobar. Del antiguo zoológico que tenía el capo casi todos los animales murieron o fueron enviados a otros centros. Lo único que queda son 18 hipopótamos salvajes que nacieron de una pareja que Escobar había importado de África en los años 80. Nadie sabe qué hacer con ellos, pues se teme que siga aumentando su número y se conviertan en un peligro.