Los tiempos cambian

3 de noviembre de 2012

La asistencia del presidente Santos a la convención de La U acabó con la pretensión de que los funcionarios públicos no pueden participar en política. Esa norma venía perdiendo terreno desde el caso emblemático en que el procurador Mario Aramburo amonestó al entonces presidente Carlos Lleras por echarle pullas al general Rojas Pinilla, candidato de la Anapo en 1970. La última sanción conocida fue la del gobernador del Valle, Juan Carlos Abadía, quien por invitar a Andrés Felipe Arias a una reunión de alcaldes en el departamento fue destituido e inhabilitado por diez años. Con la llegada de Santos con cinco ministros a una convención de un partido, a actuar como jefe de esa colectividad y tirar línea, va a ser muy difícil en el futuro aplicar sanciones de esa naturaleza a funcionarios que hagan algo parecido.