No solo es María Ángela I

24 de noviembre de 2012

Un caso que en los años ochenta se ventiló en la Corte de La Haya, puede servir para ilustrar lo que Colombia podía haber hecho antes del fallo que le quitó una amplia porción de mar en el Caribe. En 1984, Nicaragua denunció a Estados Unidos por el apoyo a los contras. Cuando el departamento de Estado se dio cuenta de que podía perder se rehusó a seguir participando en los alegatos y rechazó la jurisdicción de La Haya para el caso. La Corte falló eventualmente a favor de Nicaragua, pero como antes de la sentencia Washington desconoció la jurisdicción, Estados Unidos nunca cumplió el fallo que lo obligaba a pagar una indemnización a Nicaragua de varios miles de millones de dólares.