PLATOS ROTOS

13 de julio de 1987

Uno de los obstáculos inesperados que se ha encontrado el gobierno nacional en su esfuerzo por obtener créditos internacionales, ha sido el de la actitud del Banco Mundial. En efecto, la entidad multilateral que tradicionalmente ha sido amiga de Colombia está atravesando una "crisis de identidad" debido a un camplejo proceso de restructuración interna. La reorganización del Banco ha llevado a que algunos puestos claves no hayan sido llenados y a que la toma de grandes decisiones --entre ellas la de créditos a Colombia--se aplace. Según los planes de endeudamiento externo del gobierno, el país necesita entre 1987 y 1990 desembolsos anuales de 754 millones de dólares, provenientes de créditos otorgados por la banca multilateral, lo cual hace que lo ocurrido en el Banco Mundial sea preocupante.