¿Qué es peor?

26 de mayo de 2012

Ahora que el gobierno ha confirmado que el carro bomba desactivado en el centro de Bogotá la semana pasada era de las Farc, pero que todavía no hay ninguna evidencia sobre el atentado contra Fernando Londoño, surge un interrogante macabro. Si se establece que el intento de asesinato al exministro también provino de las Farc significaría que una guerrilla que se creía arrinconada en la selva es capaz de planear dos golpes terroristas enormes en la capital en la misma mañana. El único antecedente de un doble acto terrorista similar lo hizo Pablo Escobar, que en el mismo día en que asesinó por la noche a Luis Carlos Galán, por la mañana había mandado matar al director de la Policía de Medellín, Franklin Quintero. Pero si de casualidad lo de Londoño no fue la extrema izquierda sino la extrema derecha, como creen algunos, significaría que tanto la guerrilla como el narcoparamilitarismo iban a poner bombas en Bogotá en el mismo día. La pregunta es qué es más grave, si eso o las dos bombas de las Farc.