SORPRESA EN EL PALACIO

20 de julio de 1998

Para nadie es un secreto que la familia presidencial se sorprendió al oír la pregunta del diario El Meridiano de Córdoba sobre la posible extradición de Ernesto Samper. Pero lo que los dejó realmente boquiabiertos fue la respuesta de Horacio Serpa al decir que sí lo extraditaría. Fue tal el shock que la primera dama, Jacquin de Samper, según sus propios allegados, entró en llanto. Gran desconsuelo y tristeza le produjeron las palabras de quien ha sido considerado siempre el más fiel amigo del Presidente.