Lucio Feuillet (izquierda), estudió música en la Universidad Javeriana, en Bogotá. | Foto: Archivo particular

CULTURA

Nuevos talentos 'made in' Pasto

Las nuevas generaciones de pastusos se mueven entre guitarras, cafés y hasta YouTube. Conozca algunos de los más destacados talentos locales.

2 de octubre de 2017

Lucio Feuillet

Llego a Bogotá en 2002 para estudiar música en la Universidad Javeriana. Sus primeras presentaciones las hizo en bares y eventos y también produjo melodías por encargo para cine y televisión. De forma paralela había empezado a trabajar en sus propias canciones, hasta que en 2014 publicó el álbum Indicio. Su carrera como cantautor se consolidó este año con el lanzamiento de Provinciano, que incluye influencias de ritmos andinos como el sanjuanito y una colaboración con Marta Gómez.

Felipe Gómez

Foto: Óscar Coral

Primero se fue de Pasto para estudiar arquitectura en la Universidad de los Andes. Después de una estadía en Europa regresó a Bogotá, donde acumuló experiencia en su profesión hasta que tomó la decisión de aplicar sus conocimientos en su lugar de origen. Mientras que la ciudad vive un proceso de transformación, debido al boom de la construcción y a cambios en las reglamentaciones urbanísticas, Gómez le ha dado un nuevo aire con proyectos como AvLilah, un café ubicado en una casa construida en la década de los setenta cuyo diseño de interior fue premiado con un Lápiz de Acero este año.

Juan Sebastián Quintero

Foto: Julián Galán

Se fue a Bogotá con el objetivo de estudiar cine y aunque sus expectativas siempre fueron trabajar detrás de cámaras se convirtió en el rostro de un canal en YouTube que él y un grupo de amigos decidieron crear en marzo de 2014: Hijuepúchica Transmilenio. Más allá del humor basado en situaciones con las que cualquier persona –independiente de su región de origen– se puede relacionar, lo que prevalece en este proyecto es el orgullo de Quintero por su ciudad de natal y la cultura que la influencia.

D. Antonio Villota

Foto: Pablo Villota

Este pintor no ha querido migrar de su ciudad, sobre todo, porque los paisajes de Pasto son el sello de su obra. “No puedes tomar una foto al Volcán Galeras sin que se vean los cables. Yo los tomé a favor. Para mi comunican, dan corte y también encierro”, cuenta. Por eso en los cuadros de este artista visual de la Universidad de Nariño, sobresalen de lado a lado cables sueltos o unidos donde usualmente aparecen trapecistas o personajes ficticios.

Al principio, el paisaje rural de su ciudad natal fueron su fuente de inspiración, hoy, la urbanidad de la misma lo deleita y es uno de los pocos artistas nariñenses que juega con la técnica de fotografía intervenida con pintura. Así mismo, la gente lo conoce por detalles únicos como agregar óxido a sus obras, lo cual enaltece los colores nocturnos de la ciudad. Sus pinturas y demás creaciones  artísticas se pueden encontrar en su galería D. Antonio Villota, la única independiente de la capital nariñense.