Rionegro se ha convertido en una de las ciudades con mayor crecimiento poblacional, urbanístico y universitario del país. | Foto: Pedro Londoño

CONTEXTO

A Rionegro le llegó la hora de la modernidad

Estas líneas del exgobernador de Antioquia, Luis alfredo Ramos, lo pondrán en contexto sobre Rionegro, la primera ciudad del Oriente antioqueño.

Luis Alfredo Ramos Botero*
27 de noviembre de 2017

Situado en el oriente de Antioquia a una altura de 2.100 metros sobre el nivel del mar tiene cerca de 130.000 habitantes. La migración a esta ciudad se siente a diario en sus calles.

El gran impulso se dio en la mitad de los años ochenta, cuando se puso en funcionamiento el aeropuerto José María Córdova (héroe de la Independencia nacido en la región). Este constituyó en el eje del progreso local y regional, ayudando a la transformación de Rionegro con nuevas vías y con la llegada de distintas industrias que antes estaban asentadas en el Valle de Aburrá. Al mismo tiempo llegaron universidades que hoy avanzan a la par con el municipio.

El gran crecimiento de vivienda y sobre todo de casas de campo de estrato alto, es un aspecto visible para todos los visitantes. Podría decirse que muchas familias de Medellín y de otras ciudades quisieran tener una parcela en los alrededores de Rionegro, unos para vivir definitivamente y otros para pasar los fines de semana.

El crecimiento de centros comerciales y urbanizaciones ha hecho que el valor de la tierra en el municipio se haya disparado. En el sector suburbano, el metro cuadrado supera los 350.000 pesos en algunas zonas, lo que ha influido en el precio del metro cuadrado urbano que hoy oscila entre 4 y 5 millones de pesos.

Con toda la actividad económica, empresarial y poblacional, hoy, la ciudad enfrenta su más grande reto: tener una infraestructura vial y un completo plan de desarrollo y urbanismo que siga haciendo amable la vida en lo que hasta hace poco era un pueblo, que hoy busca ser cabeza de un área metropolitana que empieza a vislumbrarse.

Este desafío ha llevado a la actual administración a adelantar un proyecto de planeación y desarrollo que incluye la construcción de un tranvía ligero en altura, que atravesará la ciudad en una extensión de 18 kilómetros y servirá para hacer más rápida y eficiente la movilidad. La reciente vinculación de EPM para manejar los servicios de acueducto y alcantarillado es otro aspecto positivo para toda la comunidad.

El tranvía ligero que irá sobre un monorriel, tendrá un valor cercano a los 21 millones de dólares por kilómetro y su financiamiento obedece a la constitución de una asociación público privada que operará a través de una concesión. Este proyecto estratégico estará en construcción a partir del segundo semestre de 2018 y entrará en funcionamiento a los 24 meses de iniciada la obra.

Rionegro enfrenta estos desafíos gracias a la administración del actual alcalde, Andrés Julián Rendón Cardona, dirigente visionario que tiene la gran responsabilidad de concebir una ciudad para el futuro, compromiso que no es menor pues está considerada como una de las de mayor crecimiento en el país.

Al gran empuje dado hace años por el aeropuerto, se suma el desarrollo que traerá el Túnel de Oriente que se construye desde junio de 2011, con una extensión de 8,4 kilómetros, para unir a Medellín y el Valle de Aburrá con el Valle de San Nicolás. Así tendremos en Rionegro una de las obras más esperadas en Antioquia, financiada con recursos propios y con un valor cercano al billón de pesos. Podremos entonces decir que Medellín quedará a 20 minutos del aeropuerto José María Córdova.

No nos equivocamos al afirmar que vivir en Rionegro y en el Valle de San Nicolás es un lujo, gracias al maravilloso clima, con una temperatura promedio de 20 grados centígrados, al ambiente descontaminado y a lo que es más fundamental, la cercanía con gente trabajadora y de sanas costumbres empeñada en cuidar y proteger todo lo que se relaciona con la región.

Las universidades suman importantes activos al proceso social y educativo. En los últimos años ha llegado Eafit, una subsede de la Universidad de Antioquia, que unidas a la tradicional Universidad Católica de Oriente y al Politécnico Jaime Isaza, constituyen una excelente oferta para estudios profesionales y de posgrado. Los 18.000 estudiantes de educación primaria y secundaria serán sin duda los beneficiarios de las nuevas obras de modernización y progreso.

La ciudad y la administración hacen grandes esfuerzos en la reconversión social y en la atención a diez barrios subnormales que tienen prioridad en la inversión para dar un justo equilibrio a los distintos sectores de la ciudad.

En resumen, Rionegro se constituye en uno de los sitios más atractivos y confortables para vivir, trabajar o estudiar y se proyecta hacia el futuro como el municipio modernista y líder en el oriente del departamento.

*Exgobernador de Antioquia.