Este programa seleccionó a 20 promotores ambientales que replicarán los beneficios del proyecto. Foto: Istock.

MEDIOAMBIENTE

Ecohuertas familiares

Hacer de las actividades agrícolas una labor responsable y sostenible es la consigna de este programa impulsado por las dos entidades ambientales más importantes de Antioquia.

27 de octubre de 2017

La Corporación Autónoma Regional del Centro de Antioquia (Corantioquia), y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, han unido sus fuerzas para concientizar y sensibilizar a la población de la zona para que actúe en forma respetuosa con el ambiente. La unión de estas entidades ha sido clave para generar un cambio en la mentalidad de los habitantes. Corantioquia se concentra en las zonas rurales. El Área opera en las urbanas. Juntas han logrado que 160 familias campesinas, ubicadas en las cercanías de grandes ciudades, fortalezcan sus actividades agrarias y sean responsables con su entorno por medio del plan Ecohuertas.

En ese proyecto de educación ambiental participaron 640 beneficiarios procedentes de Medellín, Caldas, Itagüí, Sabaneta, Copacabana, Girardota, Barbosa y La Estrella. Quienes recibieron la capacitación aprendieron sobre agricultura responsable con el medioambiente, y también fueron formados en técnicas de adaptación al cambio climático.

Guillermo García, vecino de La Estrella y beneficiario de Ecohuertas, dice que haber participado en el proyecto “nos enseñó a usar mejor la tierra, a sembrar verduras y hortalizas que proveen un sustento a nuestros hogares, con la seguridad de que son alimentos que se han cultivado orgánicamente, lo que disminuye la carga de insecticidas y pesticidas”.

En el desarrollo de este convenio, además de acompañar y fortalecer a 160 familias campesinas, se realizaron 180 encuentros formativos y se seleccionaron 20 promotores ambientales que replicarán los beneficios del proyecto en sus comunidades. También se celebraron tres encuentros de la Red de Promotores Rurales en Medellín, Caldas y Girardota.

En total se instalaron 20 ecohuertas que cuentan con paneles solares, filtros de agua, tanques de captación de agua lluvia y una caseta de biopreparados, mezcla de sustancias con propiedades repelentes de insectos. Estos son algunos de los ejemplos de la unión entre dos entidades con un mismo objetivo: hacer de las actividades agrícolas una labor responsable y sostenible.