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MÚSICA

Bienvenidos al futuro

El director Rene Jacobs convierte un oratorio barroco de Haendel en una obra premonitoria del clasicismo.

15 de abril de 2006

­Saul
Haendel
Joshua · Bell · Zazzo · Ovenden · Saks
RIAS Kammerchor
Concerto Köln · Jacobs
Harmonia Mundi · Forum

Como en la música hay el prurito de clasificarlo todo, Beethoven es un romántico; Debussy, un impresionista, y Bach y Händel son la culminación del barroco. Esos son dogmas inamovibles.

Sin embargo, luego de oír este Saúl, de Georg Friedrich Haendel, flaquea la fe. Por obra y gracia del director belga, René Jacobs se mantiene como un barroco pero, con giros y facetas que lo acercan al clasicismo de la segunda mitad del siglo XVIII. Y quien sale más fortalecido es el mismísimo Haendel, que se libra de encasillamientos.

Haendel lo compuso en 1738, tras serios quebrantos de salud, y dirigió personalmente el estreno un año más tarde en el King's Theatre de Londres. Con tal éxito, que se siguió presentando a lo largo del siglo XIX.

No en vano trabajó muy estrechamente con su libretista Charles Jennens (autor de una edición crítica de Shakespeare): sabía bien que podría ser mal interpretado por ciertas posibles alusiones a los Hannover, recién llegados al trono inglés pese a las resistencias de los partidarios de los Estuardo.

La versión es extraordinaria, el elenco solista de primera, la orquesta suena gloriosa y las intervenciones del Rias-Kammerchor modélicas. Pero la revelación ocurre con algunos fragmentos orquestales, como la solemne Marcha fúnebre, la introducción de arpa al aria de Saúl del acto II y una breve sinfonía del I, que si se la oye sin prejuicios, en sus primeros compases tiene el clima del Rapto en el Serrallo y más adelante resulta inevitable no recordar La flauta mágica.

¿Una nueva visión de Haendel? Puede ser. Hasta flota en el aire la posibilidad de que sea el Haendel de los oratorios el mejor compositor operístico del barroco tardío.

Haciendo de lado especulaciones futurísticas, se trata de una grabación que pisa fuerte y, de paso en el mercado local, por precio y notoriedad compite ventajosamente con sus eventuales rivales.

Mozart
EARLY STRING QUARTETS
Cuarteto Casals
Harmonia Mundi · Forum

Una ventaja de la celebración de los 250 años del natalicio mozartiano es la aparición de grabaciones novedosas de su obra. Esta es una de esas. Por muchas razones: el cuarteto es la forma más exigente de la música (a partir de la segunda mitad del siglo XVIII), y la que demanda más concentración y preparación por parte del oyente.

Sin embargo, este álbum es una forma deliciosa de adentrarse en el complejo mundo del cuarteto. Porque reúne los de juventud, desde el K.80 en Sol mayor, escrito en una noche (1770) a los 14 años, hasta el K.173, escrito en Viena (1773).

Es decir, desde los cuartetos de gusto italianizante y llenos de melodías que rebosan alegría, hasta los de corte alemanizante, influidos por Haydn, sin duda obras maestras del género. Trece cuartetos y tres divertimentos, en admirable interpretación del Cuarteto Casals (ojo: libreto en castellano).

Wagner
DIE WALKÜRE
Polaski · Watson · Struckmann · Berkeley-Steele
Orquesta del Liceu
Teatro del Liceu · De Billy / Kupfer
Opus Arte · Forum

A Wagner hay que perderle el miedo y esta es una buena oportunidad. Porque la producción de Harry Kupfer (original para la Ópera Estatal de Berlín) es colosal, moderna, audaz y plena de grandes momentos: la Cabalgata de las valquirias y el Fuego mágico, por ejemplo.

Además, hay lo que demanda Wagner: una gran soprano, Deborah Polaski, para resolver la difícil parte protagonista de Brunhilde; un autorizado Wotan, Falk Struckmann; un brillante director, Bertrand de Billy, y subtítulos en castellano para entender qué están diciendo los dioses del Walhalla de esta tragedia wagneriana que está llena de música hermosísima.