CUANDO CALIENTA EL SOL

Si hay algo que los identifique es su interés por captar un ambiente específico, el del Caribe. Se trata de los 10 acuarelistas costeños, que conforman la exposición titulada "La acuarela en la Costa", que desde el pasado 20 de agosto está abierta en la galería Nova Terra de Bogotá. Estos mismos artistas habian expuesto con bastante éxito sus obras en la Galeria La Francia, en Medellín.

Son todos pintores jóvenes, que han venido en la actualidad a marcar la pauta en una técnica que, como la acuarela, ha sido cultivada durante varios años en la Costa Atlántica. Y dominio de la técnica es precisamente lo que se puede apreciar en la mayoria de estos pintores. Por el lado de los motivos, predominan los ambientes costeños, las calles cartageneras, los muelles, los pequeños barcos. El barranquillero Néstor Loaiza, con un criterio bastante fotográfico, se detiene en los pequeños detalles que aparecen por las calles de una ciudad costeña: los canastos, las ollas olvidadas. Alvaro Rodríguez recrea las calles de su vieja Cartagena para dejar testimonio de las antiguas puertas de madera y sus muros con cartelones. En su obra, Manuel Rodriguez logra plasmar la luz y el ambiente de las calles polvorientas, que con sus carretas bordean los muelles de pescadores.

Los interiores no están ausentes.
Rafael Espitia, que con 21 años es el más joven de los integrantes de la exposición, maneja con gran acierto los contrastes de luz que se dan al interior de los recintos costeños. Las construcciones de altos techos, los pisos en baldosa, las puertas amplias, dan la sensación de un recinto fresco que contrasta con el calor que emana de la luz que entra del exterior. En su obra, estos espacios son el motivo central mientras que la figura humana, en la que el detalle no es una prioridad, pasa a ser parte de la construcción v se confunde en ese entorno.
Alvaro Rodríguez muestra también algunas obras centradas en el paisaje marino. Los pequeños barcos llegando al puerto son un motivo para que los azules y verdes creen una sensación de paz, que contrasta con los tonos vivos que aparecen en sus otros cuadros, en los que la temática es la calle.

Dentro de este grupo de acuarelistas costeños, Carla Celia aparece como la más innovadora en cuanto al tratamiento de los temas. Mientras el resto se queda un poco en lo tradicional --la prueba está en que el paisajismo está presente en casi todos--, ella maneja grandes atmósferas que se unen y de las que aparecen, en muchos casos sólo insinuadas, las figuras en que se centra su composición. Su colorido no es tan intenso como el del resto de los participantes, y deja la impresión de ser una artista que está en plena formación.

Tal vez el más conocido del grupo sea Roberto Angulo, quien presenta una amplia trayectoria: para citar un solo ejemplo de ello, en 1978 tuvo una exposición individual en la Galeria Aberbach de Londres. Su acuarela "Riego", es sin duda una de las mejores obras de la muestra. Un grifo que sale de una pared, con un débil chorro de agua, crea una grata impresión gracias a su plasticidad y al colorido, que se ve enriquecido con el verde de una planta que recibe el agua.

En fin, esta exposición, aparte de presentar un mosaico de artistas jóvenes, demuestra hasta dónde la Costa sigue siendo caldo de cultivo para que florezca la herencia acuarelística de Hernando Lemaitre. --