DE NUEVO LOS DERECHOS HUMANOS

"Comisión Internacional de Observadores", Colombie, Imprimerie Atalier Populaire, París, 1982, 143 páginas.
Una comisión francesa internacional de observadores sobre la marcha de los derechos humanos en el mundo estuvo en Colombia el año pasado para evaluar la situación en nuestro país.
La comisión tradujo al francés la ley de amnistía aprobada en el Congreso, y escuchó las observaciones que hicieron los miembros de la Comisión de Derechos Humanos en Colombia: Apolinar Díaz Callejas, Alvaro Vásquez, Gerardo Molina; al igual que al periodista Enrique Santos Calderón, al obispo de Florencia José Luis Serna y al General retirado José Joaquín Matallana.
Díaz Callejas hace un balance histórico de los últimos años, y puntualiza los desarrollos del gobierno de Turbay en materia de torturas y de irrespeto a los derechos humanos; la existencia de grupos paramilitares como el MAS es una amenaza para la paz. Su conclusión: hay que apoyar el gobierno de Betancur, en forma amplia y decidida.
Gerardo Molina, autor del proyecto sobre la Amnistía comenta los desarrollos de la ley de amnistía y las dificultades que existen para que los guerrilleros se acojan a ella existiendo un grupo paramilitar como el MAS a la espera que el ratón salga de la cueva. Da su versión sobre la polémica entre el Procurador y las Fuerzas Armadas a propósito de esta organización armada. Finalmente, plantea su perspectiva política, en la que Firmes ha dejado de ser un fin y ha pasado a ser un medio para la construcción de un movimiento socialista, que resuelva las grandes tareas de las masas.
Alvaro Vásquez hace un largo recuento sobre la situación económica y política, para mostrar las diferencias del gobierno de Betancur en aspectos progresivos como la Amnistía, su distancia con respecto a los militares, y su adhesión al movimiento de los No alineados. Al mismo tiempo, para él, continúan en pie los grandes problemas estructurales del país.
Santos Calderón concluye en su apreciación sobre la necesaria obstaculización de la amnistía por parte de los militares, luego de exponer brevemente la naturaleza de cada uno de los grupos guerrilleros.
El general Matallana confronta los últimos desarrollos del gobierno de Turbay en materia de defensa, y la conversión de las Fuerzas Militares en un factor de contrainsurgencia interna, olvidando la esencia de ellas como defensoras de las fronteras.
Monseñor Serna Alzate se muestra optimista sobre los resultados de la ley de amnistía y las consecuencias que tendrá para el desarrollo del Caquetá.
Las entrevistas con miembros del gobierno dejan, del lado del Presidente Betancur, una impresión de estupor, al considerar la guerrilla movida por "agentes objetivos", la miseria y el subdesarrollo, y "agentes subjetivos" de gentes que han sufrido un "bloqueo mental" y han escogido alejarse de la sociedad. Betancur reconoce, por otro lado, que el Presidente colombiano tiene una competencia casí ilimitada:"el Presidente es rey", dice en su intervención. A renglón seguido expone su preocupación porque Colombia recupere su identidad.
El general Landazábal Reyes, ministro de la Defensa, hace profesión de fe democrática de las Fuerzas Armadas y las coloca del lado del civilismo y el respeto a la Constitución y las leyes:"se nos ha acusado de torturar personas. Lo sé porque en varios países del mundo esto es una estrategia. No dudo que en algún momento dado un soldado o algún elemento de rango inferior haya podido cometer abusos contra la población civil Pero en todos nuestros batallones tenemos sacerdotes, y la educación que se ha dado en nuestras escuelas a la formación de oficiales y subofciales, es muy alta".
Luego, las entrevistas con Alfredo Vásquez Carrizosa, presidente del Comité de Solidaridad con los Presos Políticos; el Comité de Familiares de Personas Desaparecidas; la Organización de Indígenas colombianos; la ANUC, USITRAS; FECODE; etc.
Hubo entrevistas con grupos armados, el M-19, las FARC, el ELN, cuyas posiciones son conocidas en la prensa.