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DESCUBRIMIENTO MISICAL

Musicólogos europeos rescataron las obras del compositor Jan Dismas Zelenka, contemporáneo de Bach

5 de septiembre de 1983

1.Zelenka, Jan Dismas."Las obras para orquesta", Camerata Bern, Alexander van Wijnkoop, (director) Discos Archiv Produktion, 2723 059, Berlín, 1983.
2. Zelenka, JanDismas. "seis sonatas en trío", Heinz HollIger (oboísta y director). Discos Archiv Produktion 2708027, Berlín, 1983.
Gracias al empecinado esfuerzo investigativo de algunos musicólogos, editores e intérpretes europeos durante los últimos años, el horizonte de la música se ha ensanchado con un nuevo nombre: Jan Dismas Zelenka. Y si a la altura de esta hora crepuscular del siglo XX continúan apareciendo sinfonías ignoradas de Mozart o grabados inéditos de Durero, no deja de resultar asombrosa la irrupción de un auténtico maestro checo bajo los empolvados archivos de la biblioteca de Dresde. Después de casi 250 años de olvido total, Archiv Produktion ha recuperado para el atónito y voraz público melómano una mínima pero satisfactoria muestra de las calidades musicales de este misterioso compositor: 10 piezas orquestales y 6 sonatas para oboe, fagot, violín, contrabajo y clavecín. Muchos artistas debieron esperar pacientemente la divulgación y justa valoración de sus obras (la pintura soleada de Van Gogh o los intrincados laberintos de Joyce, para mencionar dos notables ejemplos de este siglo), pero el caso de Zelenka desafía hasta el lento añejamiento de los mejores vinos.
Contemporáneo de Juan Sebastián Bach, con quien tiene evidentes puntos en común matizados por el espíritu local propio, Zelenka fue un músico discreto y melancólico, expuesto a las reiteradas humillaciones de la vida licenciosa y estridente de la corte de Dresde. Su extraño olvido parece obedecer más a un acto tendencioso y deliberado que a un mero accidente histórico: cruel querella de celos terminó por oscurecer su obra musical llegando al exceso de prohibir la publicación e interpretación de sus partituras. Quizá algún desteñido documento que espera aún ser descifrado en la vieja biblioteca dilucide los motivos secretos de esta persecución desagradable y discriminatoria.
Misántropo y enigmático (no en vano una de sus composiciones orquestales se titula "Hipocondría"), su música seduce por el estallido violento de los esquemas formales: una modulación construída sobre tonos vecinos es secundada de inmediato por una tonalidad lejana e inesperada. Su original tratamiento de la armonía, como su escritura enérgica y angulosa, le imprimen un estilo multicolor diferente del cromatismo usual de los músicos barrocos. La perfecta maestría en el manejo de la polifonía tradicional, aliada al dominio del madrigal italiano y de diversos aires populares checos, hacen de Zelenka el más remoto precursor de una evolución que culminaría en pleno siglo XIX con la música nacionalista. Maestro de la arquitectura contrapuntística, fue comentado por Telemann en algunos de sus escritos y el gran Bach ordenó a su hijo Wilhelm Friedemann transcribir un suntuoso Magnificat compuesto por Zelenka. Asimiló todo el bagaje musical de las generaciones precedentes para someterse a la prueba de esfuerzo que liberaría un elemento crítico enfrentado a la tradición. Fue, hasta donde puede intuirse, un entusiasta innovador. La tensión interna de sus sonatas y caprichos orquestales anticipa el vigor de otros dos checos colosales: Dvorak y Kafka. Justamente rehabilitado después de tan larga espera, Jan Dismas Zelenka hace su entrada triunfal al universo de la música eterna por la puerta grande.
¡Bienvenido, maestro!--
Jaime Valencia Villa
¿Quién fue Jan Dismas Zelenka?
Nacido en Bohemia en 1679, Jan Dismas Zelenka fue el mayor de siete hijos en el modesto hogar del organista de Lounovice, en los suburbios de Praga. Nada se sabe de su infancia y juventud: su educación estuvo al cuidado de su padre y probablemente de los jesuitas de la ciudad formación que le imprimió un carácter protundamente religioso, introvertido y piadoso. A la edad de 30 años fue contratado como contrabandista en la corte de Dresde, al servicio del conde Ludwig Josephvon Hartig, donde permaneció hasta su muerte, acaecida en 1745. En uso de una licencia sabática que se prolongó durante cuatro generosos años (1715-1719), prosiguió sus estudios musicales con el célebre profesor Fuz en Viena, con Lotti en Venecia y al parecer con el mismo Alessandro Scarlatti y su escuela operática napolitana. A pesar de los escasos datos biográficos que eruditos alemanes y checos han logrado recuperar, Zelenka murió célibe y sin hijos. No se le conoció mujer ni retrato alguno; cuatro breves cartas con el violinista Pisendel certifican su fugaz experiencia en la amistad. De su extensa obra, particularmente coral y religiosa, tan sólo quedan los vestigios reproducidos en estas recientes versiones germanas, desempolvadas de entre los viejos manuscritos que anidan perezosamente en los infolios de Dresde.--