Encuentro de jóvenes directores

La idea que el teatro colombiano atraviesa una especie de primavera teatral toma fuerza. “Es un término hermoso, pero peligroso”, dice Felipe Botero, actor y dramaturgo. “Las primaveras también tienen su final”. ¿Qué hay detrás de esto?

Para contestar a esta pregunta los protagonistas de este fenómeno discutirán el tema el miércoles 16 de abril en el auditorio Fabio Lozano de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. La discusión será moderada por el actor, dramaturgo y director, Fabio Rubiano.

“No sé de dónde surgió el término, pero se refiere a una ola dramaturgos y directores que nacimos a finales de los 70 y principios de los 80”, dice Felipe Vergara, dramaturgo y director.

A diferencia de generaciones anteriores que se formaron de manera empírica, muchos de ellos estudiaron en el exterior o en programas académicos de alto nivel en el país, como la maestría en Teatro y Artes Vivas de la Universidad Nacional.

Para este grupo de creadores es claro que no se trata de un movimiento artístico como tal. La diversidad de sus propuestas es amplia y no es posible catalogarlas en un solo estilo o género. “Quizá, lo que nos une es esa búsqueda constante en la que estamos, esa exploración de formas y estilos”, dice Vergara.

Desde obras que reflexionan sobre el conflicto armado en el país, hasta retratos de la cotidianeidad colombiana, son las propuestas de que esta nueva generación han encontrado su propio espacio y público en la escena teatral de la ciudad. Aunque sus temas no son nuevos, son tratados desde una perspectiva particular que responde a inquietudes propias de la sociedad colombiana contemporánea.

Si bien sus propuestas son percibidas como una mirada nueva y diferente, “parecería pretencioso decir que estamos renovando el teatro colombiano”, dice el dramaturgo y actor Botero. “Para mí, estamos continuando con el trabajo de generaciones anteriores”.

La llegada de nuevas voces y propuestas es positiva para la escena teatral de la ciudad y son los espectadores quienes finalmente se ven beneficiados con la diversidad de ofertas. Quizá, el reto más difícil al que se enfrentan es generar esa conexión con el público. Para Víctor Quesada es importante destacar que ese vínculo se está dando. “Si no fuese así no estaríamos hablando de una primavera en el teatro. El público está respondiendo”.

¿Qué sucede con la escena teatral de la ciudad una vez terminan los festivales? El cierre del Iberoamericano y el Festival Alternativo está cerca y la asistencia de público a las salas suele bajar considerablemente, por lo menos esa es la percepción que dramaturgos, directores y actores tienen. Esa, entre otras preguntas, será respondida en la Universidad Jorge Tadeo Lozano durante el “Encuentro con Directores”.