¡Irakere!

¡Irakere!
El más importante combo afrocubano de jazzy uno de los más respetados en el mundo, se presenta en Bogotá por primera vez desde su formación hace 20 años.

COMO UNA PREmonición en 1970, la encuesta anual entre músicos y críticos de jazz de la famosa publicación norteamericana DOWM Beat, ubicaba al saxofonista Paquito de Rivera y al pianista Chucho Valdés, cubanos, entre los cuatro primeros lugares dentro de sus respectivos instrumentos junto a luminarias como Herbie Hancock, Oscar Peterson, Chick Corea y McCoy Tyner.
De Rivera y Valdés, que hacían parte de la Orquesta Cubana de Música Moderna, una de las más celebradas agrupaciones al interior de Cuba en todos los tiempos, habían integrado un quinteto que viajó al Festival de Jazz de Polonia en ese mismo año y cuya actuación repercutió hasta reflejarse en la encuesta de Down Beat, creando alrededor un extraño fenómeno de culto por músicos que muy pocos, a excepción de Dave Brubeck y Gerry Mulligan, habían visto en persona.
Sin embargo la trayectoria de estos músicos era en la isla ya bastante extensa. En 1973 la Orquesta Moderna estalló para dar paso a Irakere, pues Valdés y De Rivera ambicionaban diseñar un grupo más flexible y adaptado a ideas que podían provenir de diversas fuentes con la música afrocubana en la base y los elementos armónicos del jazz más contemporáneo, e incluso de otras escuelas, como la clásica europea.
En su etapa seminal. Irakere agrupó a 11 de los más brillantes creadores de la música cubana de las décadas de los 70 y 80, que se dirigieron a concretar una explosiva revolución, no solo en los formatos cubanos sino en la música mundial.
La presentación de Irakere en el Teatro Libre de Bogotá el 17 y 18 de septiembre es un extraordinario acontecimiento cultural largamente soñado.

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Sonidos de la infancia
MERCEDES CORTES es una quijotesca, educadora y músico, que desdehace más de una década se enfrenta a los molinos de viento sembrados en el árido territorio de la música orientada hacia los niños, y acaba de realizar un hermoso álbum CD que titulado Animales, árboles y ríos, recopila, en un remarcable esfuerzo independiente, anteriores grabaciones suyas.
El disco es un repertorio de canciones originales con arreglos de Alvaro Posada Castaño. El álbum recurre a melodías y ritmos de Latinoamérica y recrea de modo lúdico y gozoso el entorno afectivo y cotidiano de la infancia. En Colombia, un país paradójicamente joven y de jóvenes que poco invierten energías para estimular la creatividad de quienes se dice, son la mayor fuente de esperanzas de una nación, la señora Cortés, solitaria, reafirma la necesidad de adherir un derecho básico de la niñez, la música.
Novedades
UH-OH
LUAKA BOPWARNERMTM DAVID BYRNE
"SOY VICTIMA de mi propia curiosidad. Sigo adonde mis intereses me lleven", ha dicho el mago David Byrne luego de la aparición de este álbum.
Byrne, reconocido como uno de los más interesantes y creativos artistas mundiales de las últimas dos décadas, pleno de talentos diversos y conceptos explosivos, regresa en este álbum en el que si bien todavía quedan esquirlas de su experiencia directa con con la música latina, también recupera mucho del sabor funkrock que le hizo famoso.

DANCE HALL es la expresión que identifica a uno de los más populares estilos del regae contemporáneo.
Emergido como parte de las mismas semillas del género (el reggae es una suma de músicas diversas), fue un estilo original creado por los estrambóticos discjockeys callejeros que se convertirían en los artífices de la industria discográfica independiente de Jamaica y responsables de la explosión mundial del reggae.
El Dance Hall, también conocido como "raggamuffin", es un hijo directo de la técnica del "Dub" o doblaje, versiones instrumentales que muchas veces recurren a diversas fuentes sonoras. El bajo comanda el ritmo y permite que el DJ se dirija a la audiencia, generalmente sus charlas, como en los viejos tiempos, desatan temas acerca de sexualidad, erotismo y vida callejera.
El llamado "meneíto" es una versión hispana, bastarda y lamentable de este gran estilo, del que Shabba Ranks es el rey indiscutido.

CON SABOR Y SENTIMIENTO
FM
CHECO ACOSTA
DICEN QUE Colombia no tiene ídolos juveniles, gente cuya carrera o desempeño en una actividad se convierta en rol modelo.
Pero los verdaderos ídolos no se fabrican. Por fortuna, todavía en Colombia la música y sus verdaderos hacedores crecen silvestres.
Como Checo Acosta, de Soledad, Atlántico, líder de su propia orquesta, apenas mediando sus años 20 y convertido en una de las figuras más populares de Colombia en el continente. Aunque muchos desean más ambición de los artistas nacionales, imposible en un medio de nulos esfuerzos independientes, Acosta empuja el sonido colombiano un poco más allá.