LOS HOMBRES DEL LIBERTADOR

Puede afirmarse que del puñado de hombres que vinieron a América "a conocer un campo de batalla revolucionaria", son muy pocos los que grabaron su nombre en las páginas de la historia. Las razones son múltiples y si algunas están relacionadas con el valor o la tenacidad desafiante, la ambición o la codicia sin fondo, otras dependen del más afortunado azar. Tal es el caso de Luis Perú de Lacroix, un militar francés que de los diezmados ejércitos napoleónicos vino a América en donde tuvo la suerte de conocer al Libertador Simón Bolívar. Este esperaba en Bucaramanga el desarrollo de la Convención de Ocaña, cuando Luis Perú de Lacroix se hizo su amigo y confidente. De aquellos días proviene su " Diario de Bucaramanga", documento que se ha hecho fundamental para el juicio histórico de los sucesos políticos relacionados con aquella convención.
Luis Perú de Lacroix es el primero de los Luises que aparece en el libro "Los tres Luises del Caribe" de Jaime Duarte French. Luego aparecerá Luis Aury, filibustero de origen francés que se batió con los patriotas en el sitio de Cartagena, en 1815, y posteriormente encontramos a Luis Brion, armador de Curazao, que hizo aportes significativos, en flota naviera y en dinero, a la campaña libertadora. Son, desde luego, personajes secundarios en las jornadas decisivas de las luchas de liberación, pero han dado al autor de este libro argumentos y experiencias suficientes para escribir ampliamente acerca de este período histórico americano: la Independencia. La incierta procedencia y los muchas veces dudosos procedimientos de los "Luises del Caribe" inscriben su historia en las cambiantes aguas del oportunismo, la actividad mercenaria, la piratería, la aventura y el idealismo más desinteresado. Se récortan sus figuras en un panorama histórico donde las opiniones más contradictorias dan cuenta de su vida y su conducta, siendo difícil precisar un juicio definitivo sobre ellos. De allí, de esas aguas cambiantes, los ha rescatado Jaime Duarte French y más que para realizar un juicio moral sobre sus acciones, como motivo para escribir con gran originalidad acerca de la vida política de la Independencia y los primeros años de la República, de la cual quedan establecidos los acontecimientos más importantes, cuya honda repercusión resuena a lo largo de nuestra historia republicana.
De tal manera, los tres Luises son como prismas a través de los cuales vemos discurrir la historia. Si algo tienen en común estos personajes en sus definitivas diferencias, es su honda y particular admiración, su devoción por El Libertador a cuya causa entregaron los mejores años de su vida, su fortuna y sus ideales independentistas .
Este libro ha sido escrito fundamentalmente con un riguroso sentido de la responsabilidad histórica. El caudal de los conocimientos, los autores y obras consultados, las múltiples fuentes visitadas y la segura autoridad con que relata la historia nos persuaden que en el país hay muy pocos historiadores que puedan situarse a esta altura para escribir un libro así.
Pero no es sólo la autoridad en materia histórica lo que hace tan atractivo este libro; es también su depurado estilo literario. De su lectura se concluye que el autor profesa el ideal clásico de la historia: más que una simple relación de hechos del pasado
la historia ha de formar parte de la literatura. De ahí el gozo que encontramos en su lectura. La historia de la Independencia y de aquellos primeros años políticamente convulsionados de la República es por si misma apasionante. Se relaciona minuciosamente con un proceso social y político interno, pero también establece relación con todo un mundo que la rodea, con sus intereses y sus intrigas y con sus nuevas conformaciones en la política internacional.
En este panorama los sucesos que tienen lugar en el Caribe, van a ser decisivos para la Campaña Libertadora. Entonces el Caribe se convierte en escenario de cambiantes y sorprendentes episodios históricos.
Pocas veces habíamos leído un libro de historia con el interés de este de Duarte French y pocas veces un autor nos ha subyugado así, compenetrándonos tan vívidamente con los acontecimientos que relata, dejando de paso un vasto caudal de conocimientos a nuestro favor. Al término del libro agradecemos el hecho de haber asistido al maravilloso espectáculo de reencontrar ante nuestros ojos aquellos acontecimientos capitales entretejidos a través de esas vidas paralelas y que comprenden parte fundamental de nuestro pasado, de gloria, lucha y sacrificio, dejándonos una conmovida admiración por nuestra historia.