Tras el ‘Equilibrio’

El proceso para crear esta exhibición fue como construir un rompecabezas” –explica Mauricio Gómez en medio de sus creaciones-. “Yo no quería desafiar la gravedad sino trabajar con ella. Por eso en vez de soldar las piezas debía encontrar la manera adecuada de unirlas para que estuvieran en equilibrio.” Y es que el nombre de la exposición, Equilibrio, que estará abierta hasta el 6 de junio, la describe a la perfección. Las piezas se mantienen en equilibrio a pesar de su peso.

Gómez caminó los mercados de pulgas de Quercy (Francia) en busca de antiguas herramientas de agricultura que tuvieran una forma seductora. El peso del hierro lo tenía sin cuidado a pesar de que al final del viaje debía traer los objetos a Colombia. Compró azadones, rastrillos, palas y martillos y comenzó a jugar con las formas y a unirlas unas con otras en busca de nuevas figuras. Con las piezas oxidadas formó animales, veleros y flores, y en ocasiones resulta difícil descifrar los objetos que representan.

En las fotografías, todas ellas en blanco y negro, resalta el juego de luz sobre el hierro de las herramientas esparcidas por el piso. Tanto las esculturas como las fotografías invitan a los visitantes a combinar las formas y a descifrar nuevos objetos.