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| Foto: A.P.

PERSONAJE

El adiós a Simón Díaz, autor de ‘Caballo viejo’

El cantautor y presentador venezolano falleció en su casa en Caracas, después de años de sufrir Alzheimer.

Alianza BBC
20 de febrero de 2014

Tras la noticia de su muerte, este 19 de febrero, a la edad de 85 años, los homenajes en Venezuela no se hicieron esperar. Si bien quedaron arropados por las movilizaciones de calle relacionadas con la entrega a las autoridades del líder opositor Leopoldo López.

"Con lágrimas le anuncio al país que mi amado padre, partió esta mañana", dijo su hija Bettsimar Díaz a través de Twitter. "Dios te recibe con flores y tonadas", dijo el cantante Rafael "Pollo" Brito.

"Una tregua para decirle adiós al Tío Simón", escribió en Twitter el cantautor italovenezolano Franco de Vita.

Pocos artistas representaban como Simón Díaz todo lo de bonito que hay en esa Venezuela rural, llano adentro, tan vasta y a la vez tan lejana de las sucias y caóticas zonas urbanas de mayor concentración poblacional. Y, quizás por vasta y lejana, un poco idílica y nostálgica.

Compositor, cantante, actor, animador de televisión y bromista profesional, se convirtió en uno de los representantes más notorios y queridos de la música criolla popular venezolana y en figura latinoamericana de gran proyección internacional.

Simón Narciso Díaz Márquez nació en 1928 en la zona ganadera de Barbacoas, en el centro de país, y ganó fama nacional en los años cincuenta con su programa de radio "El llanero", mientras que su relanzamiento en las pantallas en el programa infantil "Contesta por tío Simón" lo convirtió, cariñosamente, en "tío" de los venezolanos en los años ochenta.

Pero tanto en su programa como en su discografía -de más de 70 producciones- fue, sobre todo, un contador de historias: cantos y cuentos de ese campo en el que nació, creció, padeció y amó. 
Entre sus "querencias", como decía él, estaban la flor amarilla de árbol de araguaney, la punta de ganado, la sabana  y Venezuela.

Con un carisma, una sencillez y una picardía típica del hombre de su tierra, Díaz tejió las historias para todas las edades: desde "La vaca Mariposa" para los niños (una dulce tonada que cuenta cómo Mariposa esconde a su becerro recién nacido para evitar un destino ineludible) hasta "Caballo viejo", con sus "lecciones" para quienes se enamoran en la edad madura ("El potro da tiempo al tiempo porque le sobra la edad / Caballo viejo no puede perder la flor que le dan / porque después de esta vida, no hay otra oportunidad").

"Caballo viejo" es, posiblemente, su tema de más repercusión internacional y el que lo convirtió en una suerte de embajador de la música venezolana en el mundo. Reversionada decenas de veces por artistas como Celia Cruz, Julio Iglesias, Gilberto Santa Rosa, Rubén Blades y Plácido Domingo, entre otros, ha sido traducida a varios idiomas, del inglés al serbio.

Artistas internacionales como Mercedes Sosa, Caetano Veloso, Joan Manuel Serrat y Cheo Feliciano; Gilberto Santa Rosa y Franco De Vita, entre otros, interpretaron varios de sus canciones, mientras que el mismo Díaz compartió cartel con famosos que van de Mario Moreno "Cantinflas" a Atahualpa Yupanqui.

"No es una canción, es una obra, es algo mucho más interesante", dijo en una ocasión Joan Manuel Serrat.

Su larga trayectoria musical le valió numerosos reconcimientos, incluida la orden Orden del Libertador en su Orden de Gran Cordón y un Grammy latino honorífico en el 2008.

Poco después se retiró de la vida pública, afectado por el Alzheimer.