OH DESTINO EL DE BORGES

Borges, esplendor y derrota María Esther Vázquez Tusquets, Barcelona, 1996 $30.000 sí, de entrada, produce terror abordar un libro en el que alguien cuenta confidencias de otro alguien, con el cual ha tenido relación íntima. Aunque tales confidencias vengan de una persona inteligente y con sólida formación intelectual. Para no ir más lejos, baste recordar aquellas Ceremonias del adiós, en las que Simone de Beauvoir reveló con sordidez las más íntimas miserias físicas y mentales de los últimos días de Sartre. Pero no es el caso. Desde las primeras páginas de esta biografía de Borges, María Esther Vázquez deja ver la línea que va a seguir: abundante y novedosa información sobre el escritor en sus esferas privada y pública, proporcionada con profesionalismo, respeto y un evidente afecto hacia él. Vázquez sabe también entrelazar esos dos mundos, relacionando con tino la anécdota personal, la historia familiar, la actividad pública y social y la obra literaria. El libro está dividido en 12 capítulos, cada uno de los cuales se inicia con una foto de Borges, seleccionada de acuerdo con el momento de que va a tratar esa parte. Abarca los 87 años de vida del escritor: la infancia, la familia, los juegos, la guerra, el colegio, las lecturas, los viajes, las relaciones con los ultraístas españoles, Victoria Ocampo y 'Sur', los primeros amores, los dos matrimonios, las tribulaciones, los grandes y pequeños dolores, los libros en colaboración, los mejores amigos, la ceguera, la relación con la madre, los problemas políticos, el mundo del hogar, los intentos de suicidio, las minucias de su cotidianidad, las circunstancias de su muerte solitaria. Y al lado de todo ello, Vázquez va desgranando las claves y la vida íntima de sus versos y de sus personajes, las dubitaciones y meditaciones de Borges en torno a su propio arte de crear. Frente a ese Borges público con actitudes de superestar o de showman, impertinente, afecto a las boutades, mordaz y de un humor hiriente y despectivo, que todos sus lectores padecimos yo disfrutamos, Vázquez revela a un ser tímido, triste, sufriente, que solo en la madurez de los 60 años encontró plenitud, éxito y algo de felicidad. Esplendor y derrota hace parte del título de este libro. Según la autora, el esplendor equivale a la fama y a los halagos de la popularidad; la derrota, al amor que, al parecer, le fue siempre esquivo. Vale la pena anotar que este es un libro necesario para borgianos frenéticos, normales y moderados. Y también para borgianos en ciernes, que lo es el resto de la humanidad.