PANICO EDITORIAL

Apenas se supo de la emergencia económica libreros y editores entraron en pánico, pues el libro es uno de los artículos que no tienen IVA y, además, la industria nacional goza de exenciones tributarias. El único país en América Latina que carga el IVA al libro es Chile y ello constituye motivo de vergüenza internacional. De aplicarse ese impuesto y abolirse las exenciones, Colombia no sólo entraría a esa lista, sino que perdería casi el único reconocimiento positivo que se le hace en el extranjero: las bondades de su Ley del Libro de 1993, que es ejemplo a nivel mundial. Por todo ello, los organismos que tiene que ver con el tema, como la Cámara de la Industria Editorial y el Cerlac, entraron de inmediato en acción y con tan buenos resultados que, de boca del propio Presidente de la República, recibieron la noticia de que el sector no sería golpeado por la emergencia. n