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A PRECIO DE HUEVO

A partir de esta semana Tercer Mundo distribuye en el país las obras de Benedikt Taschen, el editor alemán que democratizó los libros de arte.

7 de diciembre de 1992

TRADICIONALMENTE LOS LIBROS DE arte han sido sinónimo de precios altos. Un buen ejemplar sobre la obra de Renoir, de Picasso o de Duchamp puede durar varios meses expuesto en las librerías antes de que alguien se decida a comprarlo. Tanto así que muchos libreros los encargan con el único propósito de adornar los anaqueles y de atraer la mirada de los clientes poten ciales de otros segmentos editoriales.
Suelen ser, eso sí, libros impecablemente editados, con fotografías a todo color, e impresos sobre papel de alta calidad. Por eso son tan costosos. Por costosos tan sólo están al alcance de unos pocos.
Y por estas dos razones su tiraje es bastante reducido. La historia, sin embargo, ha empezado a cambiar en los últimos años, por cuenta de un osado editor alemán, Benedikt Taschen, que un buen día resolvió aplicar en la industria de los libros las mis mas reglas de la oferta y la demanda que se utilizan en la comercialización de productos de primera necesidad.
A Taschen lo creyeron loco hace unos años cuando se apareció en la Feria de Francfort, el evento editorial más famoso del mundo, ofreciendo lujosos libros de arte a un precio tres veces menor que el de sus competidores. Predijeron para él una quiebra inevitable y aseguraron que jamás lo volverían a ver por allí.
Pero Taschen asistió a la siguiente feria con un muestrario aún más grande que el del evento anterior.
En 10 años, Taschen ha multiplicado por 10 ese catálogo con el que se apareció por primera vez en Francfort. Actualmente sus libros son vendidos en 60 países, y se traducen a 20 idiomas. Ahora acaba de llegar a Colombia, representado, por Tercer Mundo Editores, con más de 70 títulos sobre pintura, diseño, arqui tectura y fotografía. "Nunca antes se habían ofrecido en el país libros de esta calidad a un precio tan bajo", le comentó un li brero a SEMANA, Que un ejemplar de 100 páginas a todo color sobre la obra de Van Gogh, de Rembrandt o de Dalí pueda comprarse por menos de ocho mil pesos es una verdadera locura. Nunca se me ha bía pasado por la cabeza que los libros de arte pudieran convertirse en best-sellers".
Y la verdad es que el único que lo creía era Benedikt Taschen, un alemán de apenas 30 años que algún día tendrá que escribir sus me morias. Será un libro lleno de locuras, de desafíos y, de ex centricidades, pero sobre todo de aciertos.

DE TARZAN A MAGRITTE
A los 12 años se aficionó a los comics. Se convirtió en el mejor cliente de una tienda de libros de segunda que quedaba muy cerca de su escuela, en Colonia. Comenzó a guardar las historietas del Pato Donald, de Mickey Suse, de Tarzán y de Fantomas, y muy pronto descubrió que había miles de personas dedicadas a coleccionar este tipo de libros. A los 14 años realizó en esténcil su primer catálogo de ventas por correspondencia, en el que ofrecía. ejemplares raros y antiguos de tiras cómicas. A vuelta de correo recibió cientos de pedidos y miles de marcos. Unos años más tarde importó de Holanda comics eróticos que vendía cinco veces más caros, y un tiempo después abrió una librería que se llamaba "Comics books".
Su gusto evolucionó rápidamente. Se hizo amigo de los pintores que vivían en Colonia, y cuando cumplió la mayoría de edad ya había iniciado una colección de arte que hoy cuenta con más de dos mil obras.
Fanático de los grandes maestros de todos los tiempos, un día llegó a sus manos un excelente libro de Magritte realizado por la New American Library. Se enteró de que la edición había sido un completo fracaso comercial debido a su precio -70 dólares cada li bro-, de la cual se habían tirado dos mil ejemplares. Entonces comenzó a hacer cálculos hasta que decidió comprar los derechos de la obra. Imprimió 40.000 ejemplares con las mismas características, los ofreció a seis dólares cada uno, y la edición se agotó en dos meses.
Este temprano éxito lo llevó a pensar muy en serio en el negocio de los libros. En una primera etapa intentó comprar los derechos de publicación a viejos empresarios del negocio, y poco después abrió su propia casa editorial.
En 1991 Benedikt Taschen vendió más de 10 millones de libros. Este año el incremento será significativo. Sólo a Colombia aca ban de llegar 22.5 toneladas de libros de lujo que llevan su sello editorial, y que van desde el impresionismo francés hasta el diseño del mueble en las últimas décadas. Y, contadas excepciones, a un precio que oscila entre 7.900 y 15.800 pesos. No sin razón se considera Taschen un democratizador del arte.