REVIVIENDO NUESTRA HISTORIA

"La historia es la explicación del presente" sostiene
Carlos Ronderos quien recientemente terminó una "Historia política contemporánea de Colombia" entre 1930 y 1974, con entrevistas a sus protagonistas.
En nuestro país, el tratamiento de la historia estuvo ligado hasta hace muy poco tiempo a una modalidad que, por más válida que fuera, excluía otras formas de enfocarla. Los textos del hermano Justo Ramón y otros del mismo estilo mantuvieron un puesto prominente durante tantos años, que resultaba muy difícil pensar tan sólo en otras interpretaciones de los hechos. Porque si algo se ha demostrado en materia histórica (la mayoría de los historiadores coinciden en esto) es que cada punto de vista tiene una validez relativa en cuanto que,al ser ésta parcializada y al estar condicionado su autor a un ambiente social, político, económico e ideológico determinado, ninguna versión tiene la última palabra, y de ahí la necesidad de integrarlas para una mejor comprensión.
Durante los últimos años, en Colombia se ha hecho evidente una preocupación por investigar la historia desde diversos ángulos. Es interesante constatar que despues de la "Historia extensa de Colombia" propuesta por la Academia, solamente hubo otro intento de interpretación con los "Manuales de historia de Colombia" publicados por Colcultura.
Si bien la primera versión corresponde a la investigación de la Academia, con toda la experiencia, seriedad y autaridad que la ha caracterizado, el segundo era un intento por demostrar que la historia también se ha movido por hechos e intereses netamente económicos.
Sin embargo, el año 1985 constituyó una ruptura en la manera de concebir la historia cuando aparecieron, en forma casi simultánea, los fascículos de La Oveja Negra y de la editorial Salvat, mientras que Planeta reservó el lanzamiento de los suyos para este 1986. Los primeros fueron muy criticados por asumir una posición de izquierda que si bien es totalmente respetable, cayó, según los críticos, en una manera totalmente ciega de considerar los acontecimientos tomando como punto de apoyo los aspectos sociales, con sus sindicatos y movimientos estudiantiles. Pero su gran valor radica en que, por primera vez en Colombia, una casa editorial--La Oveja Negra--le confió a diversos jóvenes historiadores la investigación. En cuanto a Salvat, su serie fue coordinada por un miembro de la Academia de Historia, Gonzalo Hernández de Alba, lo cual permite al público escoger entre dos versiones de trasfondo político totalmente diferente. Finalmente, la serie de Planeta "La historia moderna de Colombia" fue dirigida por Alvaro Tirado y un comité que se propuso reivindicar ante todo, los aspectos de los períodos liberales de la historia colombiana.
LA HISTORIA EN VIDEO
Pero el boom de la historia no se limitó a los fasciculos de facil adquisición comercial, ya que la polémica llegó hasta los salones de quinto y sexto de bachillerato. Cuando Jaime Alfredo Neira introdujo en los colegios los libros editados por Estudio, "Nuestra historia", se desató una tormenta porque además de plantear una concepción diferente de la historia en que el niño se siente que forma parte de ella, los dos textos presentan una serie de conceptos que, según muchos historiadores, como Germán Arciniegas, son erróneos porque los hacen pensar, por ejemplo, que Colombia no vale nada y que su historia no presenta el más mínimo interés. La discusión llevó a que todo el mundo opinara en los distintos medios y, mal que bien, éstos continuaron en los planteles educativos.
Pero el tratamiento de la historia llega a su clímax cuando, por primera vez en Colombia, se combina la tradición más antigua, la oral, con la tecnología más moderna, el video, en "Protagonistas". El historiador Carlos Ronderos seducido por la tradición oral que existe en Colombia y decepcionado por vivir en "un país sin memoria ni memorias" según sus palabras, decidió recoger los testimonios de quienes hicieron la historia entre 1930 y 1974. El resultado impacta, no sólo por las treinta y tres entrevistas que consiguió Ronderos, con la ayuda de un equipo de investigadores sino porque, en forma simultánea, el video presenta las distintas versiones sobre un mismo acontecimiento. Aunque la última parte fue financiada por Cine Colombia, no todos los reportajes fueron fáciles de hacer: ni a Germán Zea ni a Carlos Lleras fue posible entrevistar.
Cuando se contactó a Toledo Plata, éste estaba en la clandestinidad. Ronderos viajó con todo su equipo a Panamá para esperar alguna señal en el restaurante Mc Donald's leyendo El Tiempo. La cita se pospuso para el día siguiente en un restaurante de tacos y finalmente, allí se llevó a cabo para terminar, luego de la entrevista "tomándonos veinte cervezas". Son muchas las anécdotas que se podrían contar pero lo esencial queda allí en el video, cuando "la historia es la explicación del presente", la frase que toma Ronderos de Carr, asume plena validez. Diana Lloreda --