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Sí se puede

Con la mejor acogida entre la audiencia, 'Caracol' estrenó la telenovela 'La saga, negocio de familia', una propuesta original en medio de tanto de lo mismo.

3 de octubre de 2004

La saga, negocio de familia
Director: Juan Carlos Villamizar
Libretista: Dago García
9:00 p.m. Lunes a viernes
Canal 'Caracol'

El retrato de una familia colombiana de provincia, los Manrique, que viene a Bogotá en los años 20 a probar suerte y termina, por azar, matriculada en una de las más grandes y peligrosas organizaciones del crimen y la delincuencia es lo que ofrece canal Caracol durante su prime. La saga, negocio de familia narra una historia que continúa de una generación a otra hasta hoy.

Se le abona el hecho de tener un elenco de actores ciento por ciento colombianos: Robinson Díaz, Katherine Vélez, Flora Martínez, Vicky Hernández, Frank Ramírez, Edgardo Román, Fernando Solórzano, Germán Quintero y Fernando Arévalo, entre otros.

Además tiene una impecable puesta en escena: un vestuario muy pulido y acorde con la época: los zapatos combinados de Tomás, la ruana de lana virgen muy bien llevada por Robinson, la ropa de paño del niño; una utilería buscada con minuciosidad: muebles, tocadores, lencería, unos antiguos carros bellísimos. Guarnizo y Lizarralde se lucen con la dirección de arte. La música agrada.

Definitivamente, una propuesta original en medio de un árido terreno de telenovelas globalizadas, culebrones extranjeros de la tarde -con contadas excepciones- y reality shows. Este primer trabajo en solitario del libretista Dago García pinta bien.

Y los resultados del rating también dejan muy buen sabor. No basta tener como antecesor en la rejilla a Pasión de gavilanes, que le genera un arrastre definitivo de audiencia; también demuestra una positiva acogida de un público en su mayoría femenino y de la teleaudiencia de entre 25 y 39 años especialmente. Queda, con un share de estreno de 63,4 por ciento y 3.145.000 espectadores, como la emisión más vista del día en el país. Incluso supera la cifra que obtuvo el estreno de Pasión de gavilanes en octubre del año pasado: 55,1 por ciento y 2.436.000 televidentes, y hasta la media que acumulan en share los gavilanes este año: 62,4 por ciento

Pero Marilyn, con la que todos quieren, ve afectada ciertamente su tajada de la torta, como sucedería con cualquier estreno que desestabiliza a su enfrentado. Marilyn de RCN obtiene un share de 24,3 por ciento el lunes 20 -estreno de La saga- acompañado por 1.230.000 televidentes, mientras que su promedio es 29,6 por ciento y 1.289.000 personas. Y, la acogida de la primera semana de La saga marca 60,9 por ciento, lo cual hace evidente que por esas alturas se va a quedar por ahora.

Todo lo que salga del unanimismo es válido. Es muy interesante cuando una telenovela transporta a otras épocas, enseña a los niños y jóvenes cómo eran las cosas en Colombia a principios del siglo pasado, qué pasaba con los partidos políticos y la guerra desatada, la forma de vestir y los transportes. En contradicción con mucha basura que ofrecen los canales, el rating y la calidad pueden convivir. Hoy, que la telenovela debe tener parámetros globales para su comercialización y que la realización del género se ha vuelto una maquila, un ejemplo como éste, de nuestra cosecha, será sin duda un éxito exportable. Y sin necesidad de que hablen en mexicano.