"TAMBIEN HUBIERA FUNDIDO A AMERICA CON LAS INDIAS"

Historiador, diplomático, ingeniero, piloto y navegante, Mauricio Obregón ha dedicado su vida a estudiar los grandes descubrimientos geograficos de la humanidad: desde las conquistas de los argonautas, hasta los vuelos espaciales. Su pasión por el tema lo ha llevado a recorrera vela y en avioneta los mares del mundo, en busca de una clave para comprender mejor la historia. Con base en sus investigaciones y en sus aventuras ha escrito alrededor de una docena de libros, el último de los cuales acaba de publicarse con el título de "Colón en el mar de los caribes", un abrebocas de excepción para los festejos del quinto centenario del descubrimiento de América.

SEMANA: ¿Como llego a este libro?
MAURICIO OBREGON: Desde hace 20 años dicto una catedra del descubrimiento en la Universidad de los Andes y conferencias periodicas sobre el tema en Harvard. Este oficio me llevó a comprender que la unica manera para entender en serio esta hazalla era tratando de revivir la odisea de Colón. El libro reúne, entonces, al mismo tiempo, las vivencias de Colón, según estan consignadas en los documentos históricos, y la aventura de mis investigaciones.

S.: ¿Ha realizado al pie de la letra los viajes de Colon?
M.O.: He recorrido todas las rutas del Caribe, así como el tramo de Palos de Moguer a las Canarias, el cual, por cierto, hace poco volví a hacerlo en las carabelas que reconstruyeron los españoles, para acercarme más a lo que pudo vivir Colón. La verdad, es incomodísimo.

S.: ¿Sufrio alguno de los inconvenientes que enfrento Colon en su época?
M.O.: Sí. También yo zarpe de San Salvador, con la intención de recorrer todas las islas intermedias hacia Cuba. A partir de Crooked Islands tanto Colón como yo teníamos la idea de hacer escala en un cayo a mitad de camino, pero no pudimos arribar a este punto y debimos seguir hasta Ragged Islands y aguantar toda la noche con la embarcación de un lado al otro, azotada por olas gigantescas, y tratando de evitar que se fuera contra las rocas o quedara a la deriva.

S.: Tambien usted hubiera confundido a America con las Indias?
M.O.: En aquella época sí con una salvedad: Colón pensaba que entre Europa y las Indias había unas tres mil millas de océano por recorrer, pero los estudiosos de la geografia sabían que estos dos continentes estaban separados al menos por 10 mil millas, sin contar, por supuesto, con que un mundo desconocido se atravesaba en el camino. Espero que en aquel entonces hubiera pertenecido al grupo de los estudiosos y, en consecuencia, no me le habría medido a navegar un trecho tan largo. Por fortuna los grandes errores a veces dan como resultado grandes descubrimientos.

S.: ¿Cual considera el sitio más hermoso de los que visito Colon en el Caribe?
M.O.: Todo el Caribe es muy lindo. Yo escogería tres lugares. Jamaica, como la isla grande más hermosa. Santa Lucía, la isla chica. Y Sapzurro, en el Chocó, donde a pesar de las contradicciones he podido comprobar que también llegó Colón.

S.: ¿Cual ha sido su mayor descubrimiento?
M.O.: Cuando Magallanes murió en Filipinas, en su travesía alrededor del mundo, Juan Sebastián El cano debió continuar el viaje y le anunció al emperador Carlos V que sus aventuras quedaban relatadas en el libro de la Nao Victoria. Pero el libro no apareció hasta cuando, gracias a una pista que medio Catalina Romoli, lo encontré en el piso de "indiferentes generales" del Archivo de Indias de Sevilla. La obra consta de 30 páginas de fascinante historia.

S.: ¿Que es lo más interesante que ha aprendido en sus travesias?
M.O.: Que el método experimental no sólo es aplicable a las ciencias exactas, sino que también resulta muy apropiado para las humanidades. Por eso he llamado a la que hago historia experimental".

S.: ¿Cual considera su mayor aporte a la historia?
M.O.:Haber entendido los descubrimientos como una continuidad, desde los viajes de Odisea hasta los vuelos espaciales. Los he experimentado casi todos: cuando no ha sido posible, como en el caso de la conquista del espacio, al menos he tenido la oportunidad de estar en el centro de control de la Nasa. Y pienso que de todos, el de Colón fue el que más cambió la historia. De ahí mi interés por el libro que acabo de publicar.