Home

Cultura

Artículo

Tocatta y premio

El órgano colonial de Tibasosa le valió a un médico colombiano reconocimiento internacional.

5 de abril de 1993

LA PROFESION DE Mario Fernando López es la medicina. Su afición, la música, y su gran pasión, el órgano.
lncluso es un cumplido intérprete de este instrumento.
En 1988 fundó la Sociedad Arthur Rubinstein, para el fomento de la música y la representación de grandes artistas. Así tiene presencia en el medio y rinde homenaje a su ídolo pianístico.
Entre uno y otro paciente le queda tiempo para investigar los pocos órganos que en Colombia se conservan de la época virreinal y del siglo XIX. Cuando llegó a sus manos la convocatoria del concurso internacional "Los órganos coloniales de América Latina", de la comisión española del Quinto Centenario y la fundación Taixa de Galicia, no tuvo problema.
Trabajó arduamente, terminó una de sus investigaciones y la envió a España.
Optó por el deteriorado instrumento de la iglesia colonial de Tibasosa, en Boyacá. Llegó hasta el nombre del Luthier: el artesano Antonio Ceferino Caviedes, de Cerinza, Boyacá. Escudriñando pudo determinar cuántas veces y cuándo ha sido restaurado "generalmente con un desconocimiento técnico y carencia de recursos".
Hizo un estudio juicioso y profesional, y emitió un diagnóstico preciso: "El mecanismo de los tiradores de los registros funciona satisfactoriamente" luego añade: "No así el que comunica cada una de las teclas con sus respectivas válvulas en las secretas". Lenguaje cifrado que entendió claramente el jurado presidido por la organista Cristina García Vanegas. Tanto así que acaban de otorgarle el segundo premio del concurso.
Para López, de 29 años, el premio es importante si conduce a la restauración de estas joyas musicales. Pero sobre todo como un antecedente para recuperar el repertorio colonial, que "más que olvidado es prácticamente desconocido .