Home

Cultura

Artículo

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Por orden del Gobierno Nacional los caballos deberán ser sustituídos por vehículos automotores. La opción más viable para muchos carreteros son los motocarros. Sin embargo no todos los carreteros se sienten cómodos con la idea de conducir una motocicleta y no un animal.

Foto: Cristian Mendoza /
1/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Alexander Rozo, de 37 años, lleva toda su vida entre caballos y carretas. Su mamá distribuía frutas y verduras por las principales plazas de mercado de la ciudad con más de una docena de carretas. Actualmente es uno es de los líderes del gremio, que se encuentra en una dura negociación con la administración distrital por el sistema que debe usarse para sustituir el uso de caballos y el modelo económico que respaldará ese cambio.

Foto: Cristian Mendoza /
2/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

En su primera parada 'Alex', un potro de tres años, aprovecha para comer un poco de pasto en un andén. no volverá a probar bocado hasta que vuelva a su "establo" más de cuatro horas despues.

Foto: Cristian Mendoza /
3/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

La chatarra no sólo consiste en pedazos de metal, la limadura de hierro también es útil para los carreteros. Pero, como no cuentan con elementos de protección, recolectarla afecta su salud, generándoles problemas respiratorios y visuales.

Foto: Cristian Mendoza /
4/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Los carreteros han sectorizado la ciudad y trabajan en algunas zonas específicas. Alexander dice que trabaja en la zona comprendida entre Paloquemao', el barrio Carvajal y Soacha. Saliendo siempre de Meissen en Ciudad Bolivar al sur de la ciudad: "Ir más lejos sería maltratar mucho un caballo".

Foto: Cristian Mendoza /
5/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Ante el inclemente sol o las fuertes lluvias 'Alex' y su dueño salen cada día a cumplir con sus recorridos. Sólo descansan el domingo pues es el día que Alexander tiene destinado para compartir con sus hijas.

Foto: Cristian Mendoza /
6/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Maniobrar entre carros, motos y buses no es sencillo. La circulacion de las carretas genera trancones y los conductores son poco tolerantes con los artesanales vehículos. En algunas ocasiones los 'cierran' y constantemente les pitan, los caballos soportan una gran cantidad de tensión y algunos llegan incluso a infartarse en plena vía pública debido al cansancio y el estrés.

Foto: Cristian Mendoza /
7/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

La destreza del carretero no solo se evidencia al maniobrar entre el tráfico. Saber frenar y dirigir el ritmo y velocidad del galope del animal también es importante. Algunas vías pueden resultar peligrosas por su inclinación y la velocidad que puede alcanzar el caballo si el carretero no lo controla adecuadamente.

Foto: Cristian Mendoza /
8/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

No todas las carretas Bogotá son tiradas por caballos. Algunos vendedores informales recorren las calles con pequeños planchones de madera ofreciendo frutas o recogiendo cartón y material reciclabe para vender a los centros de acopio.

Foto: Cristian Mendoza /
9/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Si bien los caballos son animales de tiro y gran fuerza, en Bogotá muchos de sus amos abusan de sus cualidades físicas. La carga que deben soportar incluye chatarra, escombros y basura, muchas veces en extenuantes jornadas en las que descansan poco y se alimentan mal.

Foto: Cristian Mendoza /
10/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

La dieta de los caballos consiste en zanahoria, pasto y melaza. La mayoría de veces los animales son mal alimentados y descansan poco: "El verdadero carretero, el de tradición, primero le da de comer a su caballo y despues ahí si come, por que uno sabe que si el animal no se alimenta bien, no trabaja bien tampoco". dice Rozo.

Foto: Cristian Mendoza /
11/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

'Alex' era usado para robar. En su última aventura en el mundo criminal fue herido en su pata izquierda y desde entonces, hace dos años, ha tenido que recibir tratamiento. Hoy se encuentra plenamente recuperado y ha perdido la agresividad y el nerviosismo que lo acompañban en esa epoca, su amo está pendiente de controles veterinarios para asegurarse de que no se resienta su herida.

Foto: Cristian Mendoza /
12/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

El material recolectado por Alexander va a la chatarrería, que a su vez la envía a una planta de reciclaje. Una bodega, no siempre cubierta, una bascula y dinero en el bolsillo es todo lo que necesita un 'chatarrero' para montar su negocio de acopio de metal. En el recorrido acompañado por Semana.com, el material sumó poco más de 250 kilos que representan cien mil pesos para el carretero.

Foto: Cristian Mendoza /
13/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Como la chatarra se vende por peso, el planchón de la carreta es limpiado a fondo para asegurarse de no perder el esfuerzo realizado durante toda la mañana.

Foto: Cristian Mendoza /
14/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Hace cinco años, cargando material, Alexander se cortó los tendones con una lamina de hierro. Quedó incapacitado por seis meses, y tuvo que trabajar con una sola mano, dirigir la carreta de esa manera le causó problemas en la espalda: "Actualmente estoy enfermo, pero no puedo dejar de trabajar". Sus dos hijas estudian, una en la universidad y la otra termina este año el bachillerato, por eso no puede perder días de trabajo.

Foto: Cristian Mendoza /
15/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Herrar un caballo en el sur de la ciudad cuesta 20.000 pesos. Los herreros trabajan varillas de hierro, de construcción, a altas temperaturas para darle la forma a las herraduras. Muchos carreteros prefieren herrar ellos mismos sus animales, una operación bastante delicada que puede lastimar seriamente al animal si no se hace adecuadamente.

Foto: Juan Carlos zapata /
16/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Este corral, ubicado en frente del hospital de Meissen en Ciudad Bolivar, es propiedad de una tía de Alexander que cobra 4.000 pesos por hospedar un caballo una noche. El parqueadero, como tambien lo llaman, lleva más de dos años en funcionamiento.

Foto: Cristian Mendoza /
17/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Los caballos son hospedados en desvencijados corrales de madera y latón. No todos trabajan durante todo el día y permanecen encerrados hasta la hora de su turno o hasta que una de las personas que los cuidan los saquen a caminar al separador de la avenida que queda frente al corral.

Foto: Cristian Mendoza /
18/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

'Alex' es un caballo privilegiado en su alimentación; al llegar a su "cuarto" encuentra pasto fresco, melaza y abundante agua. Su dueño, además, lo baña cada ocho días, lo cepilla y le aplica aceite de bebé para mantener su pelo brillante y limpio.

Foto: Juan Carlos Zapata /
19/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

El corral atiende entre 12 y 18 caballos. La familia de una tía de Alexander es la encargada del lugar. Mantienen los cuartos limpios y asean a los animales por un costo extra.

Foto: Cristian Mendoza /
20/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

Los cuidadores sacan de vez en cuando a los caballos a "pastar" en el separador de la avenida Boyacá frente al hospital de Meissen.

Foto: Juan Carlos Zapata /
21/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

En enero 'Alex' pasará de este corral a una finca en La Calera, su nuevo propietario adoptará dos caballos más. Alexander dice que siente mucha tristeza al separarse de compañero de trabajo después de dos años juntos.

Foto: Cristian Mendoza /
22/23

GALERÍA

Postales de un día a bordo en una carreta

'Miguel' es el otro caballo de Alexander, mucho más viejo que el potro que condujo en esta jornada, estará un par de meses fuera de circulación para retomar fuerzas. A más tardar el próximo 31 de enero será entregado en adopción.

Foto: Juan Carlos Zapata /
23/23