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Corrupción en la FIFA: castigan a unos, exoneran a otros

Los escándalos de corrupción en el seno de la FIFA se resolvieron con la sanción de varios de sus directivos pero sin afectar a las candidaturas de España-Portugal y Qatar.

Alianza BBC
18 de noviembre de 2010

Después de que la FIFA hiciera "rodar cabezas" por los escándalos de corrupción en la elección de las sedes de los mundiales de 2018 y 2022, las candidaturas de España-Portugal y Qatar continúan en la contienda y parece que con el camino despejado. Pero, ¿también todas las dudas?

El Comité de Ética de la FIFA anunció este jueves multas y la suspensión temporal de los dos directivos acusados de corrupción por un periódico británico, pero las aspiraciones ibéricas y qataríes salieron indemnes de la investigación.

A los españoles y portugueses, que aspiran a organizar de manera conjunta el torneo de 2018, se les acusaba de apañar un intercambio de votos con Qatar 2022: "colusión" en jerga técnica.

El presidente del Comité de Ética, Claudio Sulser, sin embargo, informó que "no se encontraron evidencias" de colusión.

Sin dar detalles sobre la investigación, Susler se limitó a señalar que españoles y qataríes no fueron interrogados.

La pesquisa consistió, según confirmó Sulser ante los medios en Zurich, en evaluar las declaraciones que ambas candidaturas enviaron por escrito.

"De haber sido así, es inevitable que surjan cuestiones acerca de si efectivamente la FIFA conseguirá despejar todas las dudas en torno al proceso", comentó el especialista en Deportes de BBC Mundo, José Pinochet.

Sanciones

Por lo pronto, quienes no salieron bien parados de la investigación fueron Amos Adamu, de Nigeria, y Reynald Temarii, de Tahití, los miembros del comité encargado de seleccionar las sedes acusados de corrupción en un reportaje publicado por el diario británico The Sunday Times.
Temarii fue suspendido de todas las actividades relacionadas con el fútbol por un año y multado con US$5.000.

Por su parte, Adamu fue suspendido de todas las actividades relacionadas con el fútbol por tres años y multado con US$10.000.

También hubo sanción para Ismael Bhamjee de Botswana (cuatro años de suspensión), y para Amadou Diakite de Mali y Ahogalu Fusimalohi de Tonga (tres años), así como Slim Aloulou de Túnez (dos años). Para estos, la multa supera los US$10.000.

Todos disponen todavía de la posibilidad de apelar la decisión ante una instancia superior dentro de la propia FIFA y, de ser el caso, continuar ante un tribunal independiente y luego en última instancia ante la justicia suiza.

"No es la primera vez que el controvertido sistema de selección de sedes de grandes acontecimientos pasa por escándalos de corrupción y acaba con sanciones de algunos directivos, pero sin cambios estructurales de fondo en la fórmula", apuntó Pinochet.

El especialista en Deportes de BBC Mundo recordó además que este problema no es exclusivo de la FIFA, pues también el Comité Olímico Internacional ha se ha visto salpicado por escándalos similares.

La víspera, informe técnico

La resolución del Comité de Ética llega un día después de la publicación del informe técnico de la comisión de la FIFA que en septiembre visitó los países aspirantes a organizar los mundiales de 2018 y 2022.

Las sedes se decidirán simultáneamente el próximo 2 de diciembre en Dinamarca. A 2018 aspiran las candidaturas conjuntas de España-Portugal, y Holanda-Bélgica, así como Inglaterra y Rusia. Para 2002 compiten Australia, Corea del Sur, Estados Unidos, Qatar y Japón.

El informe técnico fue recibido con entusiasmo por los impulsores de la candidatura ibérica por cuanto constató que supera a sus rivales en número de canchas –además requiere la menor inversión (US$2.000 millones)– y en número de entradas a la venta.

También es la que planea vender más entradas (3,7 millones). España y Portugal superan holgadamente el número mínimo de plazas hoteleras, aunque en eso gana Rusia. El punto flaco es la falta de claridad respecto a los operativos de seguridad.

A Rusia le critica, sobre todo, la falta de infraestructuras en transportes, aunque la candidatura aclaró que esperan tenerlo resuelto para la fecha del campeonato.

Los Países Bajos recibieron sin sorpresa la alusión a la falta de plazas hoteleras, algo a lo que restan importancia.

Para los británicos, las objeciones recibidas son asuntos menores en contraste con las recibidas por los otros aspirantes.

En cuanto a 2022, la valoración de Estados Unidos es positiva aunque se echa en falta mayor compromiso del gobierno con la organización.

También Qatar recibió parabienes por lo novedoso de concentrar el campeonato en un radio de 60 kilómetros, aunque se mantienen las dudas por el calor extremo.

Corea del Sur, que plantea que se disputen algunos partidos en su vecino comunista del norte (con el que técnicamente continúa en guerra), fue criticada porque la mayoría de los visitantes tendría que alojarse en hoteles de solo dos o tres estrellas.

Los presupuestos de Japón fueron calificados como "de riesgo medio", mientras la pega de Australia es la falta de capacidad hotelera, así como la previsible caída de los ingresos televisivos en Europa –por el horario de los partidos–, tacha que comparte con sus dos rivales asiáticos.