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En total jugó 357 partidos y marcó 369 goles para un promedio escandaloso.

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El filipino que está por encima de Messi: Paulino Alcántara

Oficialmente, Messi es el máximo goleador en la historia del Fútbol Club Barcelona, y para muchos, el mejor jugador de todos los tiempos. Y aunque ya ha batido varios récords en su equipo, aún le queda superar al goleador absoluto: Paulino Alcántara.

21 de marzo de 2012

Nació el 7 de octubre de 1896 en Iloilo, Filipinas, por entonces colonia española. Paulino Alcántara Riestrá de madre filipina y padre español, llegó en 1899 a Barcelona, año de fundación del equipo ‘culé’.
 
A muy temprana edad fue fichado por el Barça y como los más grandes cracks en la historia del fútbol, debutó muy joven en una tarde de ensueño el 25 de febrero de 1912: con tan solo 15 años y 4 meses de edad, le marcó tres goles al desaparecido Català EC vistiendo la camiseta azulgrana.
 
Con el tiempo, Alcántara se convirtió en una leyenda, más aún por su potente disparo que por un curioso episodio le valió el apodo de ‘el romperredes’: en 1922, en un partido entre España y Francia, el filipino nacionalizado en el país ibérico pateó tan fuerte que el balón perforó la red.
 
En total jugó 357 partidos y marcó 369 goles para un promedio escandaloso que lo hace el verdadero goleador histórico y absoluto del Barcelona.
 
La discusión está en que para entonces, en ese primer tercio del siglo XX el fútbol en España no se había profesionalizado y no fue sino hasta 1929 cuando se inauguró la liga. Alcántara jugó entre 1912 y 1927, ganó 5 Copas del Rey (entonces Campeonato de España) y 10 Campeonat de Catalunya, pero aún así, sus goles no entran en la cuenta oficial.
 
El ‘romperredes’ que además fue el primer asiático en jugar en un club europeo, se retiró el 5 de julio de 1927 para dedicarse completamente a su otra profesión, la medicina, pero poco después volvió a las toldas catalanas como directivo entre 1931 y 1934.
 
Al igual que leyendas como ‘el Trinche’ Carlovich o Heleno de Freitas, de Paulino Alcántara solo existe un viejo registro fotográfico y unas memorias como capitán del Barça, pero ningún video. Sin embargo en la retina de la historia permanece su característica figura: un tipo flaco, aparentemente débil y siempre con el pañuelo blanco colgando de la pantaloneta.
 
Para Messi ya no caben los calificativos. Su técnico Josep Guardiola se limita a decir que “estamos frente al más gran” y que simplemente “lo hace todo bien y, además, lo hace cada tres días".
 
Cada gol del argentino es mejor que el anterior y aunque ya no cabe duda de su talento y la discusión del número uno del mundo es en vano, Messi tendrá que convertir 135 goles para ser el verdadero goleador absoluto en la historia del F.C. Barcelona. A este ritmo, seguro que unos dos años serán suficientes.