EL REY HA VUELTO

Esta vez el reto es mayor. Si en años anteriores el público colombiano se daba por bien servido con que sus corredores ganaran dos o tres etapas y la camiseta de la montaña, después del triunfo de Luis Herrera en la Vuelta a España del 87 las cosas han cambiado. Hoy en día los "escarabajos" están obligados, no sólo con los hinchas nacionales sino con la comunidad ciclística europea, a demostrar que lo del año pasado fue algo más que suerte.
Es por eso que, para la presente temporada, los hombres de los tres equipos que representan a Colombia en la ronda ibérica -Café de Colombia, Postobón y Pony Malta- han adelantado una preparación a fondo.
La participación en carreras como el Tour de las Américas y las diferentes clásicas regionales, les ha dado el número suficiente de kilómetros para afrontar el reto europeo en buenas condiciones. En esta ocasión, la participación nacional rompe todos los records de corredores inscritos. Treinta pedalistas nacionales tomaron la partida en Santa Cruz de Tenerife este lunes, defendiendo los colores de las tres escuadras nacionales y otros tres lo hicieron en representación de equipos europeos, con lo cual alrededor del 30% de los participantes en la ronda ibérica del 88 son colombianos.
Sin embargo, las posibilidades de que un corredor colombiano gane nuevamente la Vuelta son pocas. Luis Herrera, a pesar de su condición de actual campeón, ha llegado a España con la intención de no mostrarse en las primeras de cambio y conservar las energías para los duros trechos montañosos que aparecerán a partir de la segunda semana de competencia, con excepción de un premio de montaña especial, el segundo más fuerte de la carrera, que será tomado en la segunda etapa. "El jardinerito" ha llegado con una preparación similar a la que tuvo el año pasado y cuenta con un equipo de buen nivel para su respaldo, en el que todo el trabajo se ha basado en las posibilidades de Lucho, principal carta colombiana en España. Sin embargo, Herrera será blanco esta vez, a diferencia de ocasiones anteriores, de la celosa marcación de todos los equipos europeos que no le darán respiro en ningún momento, pues no están dispuestos a que se repita la historia del año 87.
Otro de los escarabajos que puede dar una agradable sorpresa es Fabio Enrique Parra, actualmente en el equipo peninsular Kelme. Antiguo compañero de fórmula de Herrera, Parra desarrolló una afortunada temporada preparatoria en territorio colombiano y llega a esta competencia con el respaldo de un fuerte equipo, que ha demostrado ser mucho mejor que los netamente colombianos en las etapas contra el reloj, así como en planas con fuertes vientos de costado y en los descensos. De no ocurrir nada extradeportivo, es muy probable que Fabio Parra termine la Vuelta entre los 10 primeros y que le pelee muy de cerca a Herrera el honor de ser el mejor escalador.
Por el lado del equipo Postobón, el hombre llamado a sacar la cara es Francisco "Pacho" Rodríguez. Este corredor, que en 1985 estuvo a un paso de ganar la Vuelta cuando corría para el equipo español Zor, conoce a fondo las características de la carrera y ha demostrado haber superado las dolencias físicas que lo marginaron del triunfo en temporadas pasadas.
Es muy posible que Pacho aproveche su recuperación para sacarse un viejo clavo que tiene con la afición española, a la que nunca le pudo brindar un triunfo de peso.
La novedad entre los equipos colombianos la constituye el equipo Pony Malta. Esta escuadra, que por primera vez llega a competir a España, tiene la misión de mostrar un comportamiento regular y de dejarse ver en los grandes ascensos. Ninguno de sus hombres parece dar la talla necesaria para pelear el título individual y su tarea se enfocará hacia una buena figuración por equipos, para que quede claro que son algo más que un relleno en la carrera.
La verdad es que, como lo dijo Herrera a su partida hacia España, "ganar la Vuelta no es fácil". Sin embargo, el actual campeón se dedicará a no perder la rueda del pelotón en las primeras etapas, dejará que los grandes pasistas hagan el gasto en el llano y esperará a que rivales como Kelly y Pino flaqueen en las trepadas para lanzar un ataque a fondo que, de fructificar y brindarle el liderato, pueda significarle el respaldo de los otros dos equipos colombianos que no ahorrarán esfuerzos para llevarlo, por segunda vez consecutiva, triunfador hasta las calles de Madrid.