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ANÉCDOTAS

Embarradas olímpicas

Las mejores historias de todos los tiempos.

2 de agosto de 2008

París 1900

No existen piscinas olímpicas. Las pruebas de natación tienen lugar en el río Sena sin que, en ciertas ocasiones, siquiera se interrumpa el tránsito de embarcaciones.

San Luís 1904

La maratón fue ganada por el neoyorquino Fred Lorz. La hija del presidente Franklin D. Roosevelt, Alice, se hizo fotografiar a su lado. Poco antes de la entrega de medallas se descubrió que en la novena milla, Lorz se había subido a un automóvil que lo transportó hasta casi la entrada al estadio. Lorz fue suspendido, pero luego fue amnistiado y ganó la maratón de Boston en 1905.

Londres 1908

El italiano Dorando Pietri, a 100 metros la meta, cayó por agotamiento. Los jueces le ayudaron a pasar la línea de llegada. John Hayes, segundo de la carrera, reclamó y los jueces descalificaron a Pietri.

París 1924

En boxeo, el francés Roger Brousse fue descalificado al demostrarse que las marcas de dientes encontradas sobre el pecho de su adversario, el británico Harry Mallin, eran las suyas.

Los Angeles 1932

Pese a que los Estados Unidos estaban en plena Ley seca, se hizo una excepción para franceses e italianos que afirmaron que el vino hacía parte de su régimen alimenticio.

Berlín 1936

Francia ganó siete medallas de oro, pero la bandera francesa fue izada seis veces. La explicación: Emile Poilvé ganó el título de los pesos medios en lucha libre. Hitler tuvo tal prisa, que los organizadores, confusos, tocaron el himno turco e izaron la bandera egipcia.

Londres 1948

El jinete Humberto Mariles desobedeció la prohibición de su presidente de viajar a los Juegos. Con su caballo ganó el salto ecuestre individual y por equipos. Mariles fue el primer mexicano en conseguir oro. Pero fue condenado a 20 años de prisión por homicidio y luego detenido por narcotráfico en París.

Helsinki 1952

El reverendo estadounidense Bob Richards, que ganó la prueba de pértiga, anotó con humor: "Soy el único cura del mundo que intenta llegar al cielo por sus propios medios".

Montreal 1976

El soviético Boris Onischenko, campeón olímpico por equipos con la URSS, era favorito en esgrima. Pero fue eliminado por trucar la empuñadura de su espada. Había incluido un dispositivo eléctrico con el que podía obtener que el sistema de detección de toques le diera un punto cuando quería.