EUROPA CALIENTE

Los españoles no le perdonan al técnico de la selección nacional, Javier Clemente, haber excluido del equipo que ahora disputa en Inglaterra la Eurocopa a los jugadores jóvenes más talentosos del país: Iván de la Peña, del Bar- celona FC; y Raúl González, del Real Madrid. "Los necesito porque con ellos podemos reconquistar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atlanta", explica una y otra vez él. "¿A quién le importa el fútbol en los Olímpicos", replican constantemente sus críticos en los programas de radio, en los espacios de televisión y en cualquier bar de todas las ciudades. El disgusto es natural, porque para los europeos el torneo que se inauguró el pasado sábado en Londres con el partido Inglaterra _Suiza y que se disputará durante las próximas tres semanas, es el acontecimiento futbolístico del año. Al punto que oficialmente los derechos de trasmisión por televisión fueron adquiridos por 194 países, es decir seis más que en el pasado Mundial de Estados Unidos. La mayoría de los especialistas de los grandes rotativos deportivos consideran además que en la Eurocopa hay más calidad que en un campeonato mundial de fútbol, por una razón fundamental: al menos en teoría, todos los equipos son buenos. Las 16 selecciones clasificadas son verdaderos gigantes y por eso no cabe la expresión 'equipo chico'. Así, mientras muchos ubican a Inglaterra, España, Francia, Alemania, Italia y Rusia en la baraja de candidatos, otros expertos como Johan Cruyff suman otros nombres: "La ilusión la tengo en tres equipos. Holanda, Portugal, porque tienen muchos jóvenes y hay que ver cómo se han desarrollado; y la gran incógnita, y probablemente el mejor país futbolístico: Croacia". En Colombia a muchos puede parecerles extraño que entre los favoritos se encuentre Croacia. Pero la verdad es que este país, al igual que las otras 15 naciones participantes, llegó a Inglaterra con una impresionante constelación de estrellas entre sus filas. Es así como, por ejemplo, los desconocidos croatas tienen una nómina envidiable: Davor Suker, la última millonaria contratación del Real Madrid; Boban, uno de los cerebros del Milan; Robert Prosinecki, consentido del Barça, y Boksic, atacante del Lazio. Si así son las cosas por el lado de Croacia, basta imaginar las figuras que trajeron a este certamen los equipos con más historial para decir que la Eurocopa es una competencia de gladiadores. Además de la calidad deportiva, la fiesta está asegurada por el significado de los escenarios donde se jugarán los partidos: los ocho estadios que servirán de sede a la Eurocopa están considerados como míticos. Dos de ellos, el Anfield Road _estadio del Liverpool_ y el St. James Park _estadio del Newcastle United_ cuentan con más de un siglo de antigüedad pues fueron inaugurados en el año de 1892. Mientras que otro, el Wembley, se le conoce internacionalmente con un nombre que lo dice todo: 'La catedral del fútbol'. En este escenario, donde René Higuita dejó el recuerdo de su famoso 'escorpión', se disputará la final de la Eurocopa el domingo 30 de junio. Duro de ganar Aunque todos los equipos sueñan con reemplazar al actual campeón Dinamarca, la pelea promete ser durísima. Inglaterra por su condición de local está obligada a llegar a esta instancia. Su técnico, Terry Venables, armó un equipo combativo que enfrentará a sus rivales con un sistema un tanto novedoso: un 5-3-2, con dos veloces laterales que se suman en segundos a los delanteros, uno de ellos Les Ferdinand, compañero de Faustino Asprilla en el Newcastle. Holanda, el fútbol total, es otro obligado a llegar allí. Su técnico, Guus Hiddink, tiene una nómina de lujo, donde brillan con luz propia nueve jugadores del Ajax, entre quienes se destacan sus dos punteros Marc Overmars y Patrick Kluivert. Este último, a los 19 años ya está considerado como uno de los cinco mejores futbolistas del mundo. Por su parte el técnico de Alemania, Berti Vogts, es consciente de que si no gana el título no tendrá otra oportunidad y con seguridad perderá su puesto, pues esta fue la advertencia de los dirigentes alemanes. Por eso Vogts tiene puestas todas sus esperanzas en su hombre clave Jurgen Klinsmann. En la fase clasificatoria el rubio delantero anotó 9 goles en 10 partidos y, según los expertos, parece mantener intactas las dotes que lo llevaron a ser pieza clave de la Alemania campeona en Italia 90. Para los especialistas, los jugadores germanos saldrán a dejar el alma en la cancha como nunca lo habían hecho, ya que es conocido en el medio futbolístico el gran aprecio que todos los miembros del equipo tienen por el técnico Vogts. Italia tiene unos nombres de sensación que lo dicen todo, tanto en el banquillo como en la cancha: Arrigo Sacchi _técnico_, Pierluigi Casiraghi, Gianfranco Zola, Paolo Maldini, Fabrizio Ravanelli y Alessandro del Piero. La impredecible Bulgaria también sueña. Se sabe que sus díscolos jugadores son capaces de salir humillados por su desorden, o de arrasar a cualquier rival cuando se lo proponen. Para eso cuentan con Hristo Stoichkov, Trifon Ivanov, Yordan Letchkov y Velko Iotov, todos integrantes de la asombrosa selección del pasado mundial. Igual sucede con Rumania, equipo que puede sorprender con Gheorghe Hagi, Gheorghe Popescu, Ilie Dumitrescu y Florin Raducioiu. Francia tiene la obligación de ganar porque será la forma de entrar pisando firme en su ruta al próximo mundial, del cual será anfitrión. Para conseguir este objetivo la nómina de los galos está encabezada por Eric Cantona _campeón de la liga inglesa con el Manchester United_, el experimentado Jean Pierre Papin y la revelación del fútbol francés Youri Djorkaeff, delantero del Paris Saint Germain. Dinamarca viene a defender su título de la mano de su principal estrella Michael Laudrup, mientras que Portugal tendrá en Figo, de 23 años, su mejor atacante. Por supuesto, entre los candidatos no podía faltar España. El país ibérico es uno de los máximos favoritos de los expertos, al punto que su técnico cuenta con tal cantidad de jugadores que se dio el lujo de dejar por fuera de la convocatoria a Raúl y a De la Peña. Para este torneo, Clemente confió más en la clase de Luis Enrique y Julen Guerrero, un nombre que dará mucho de qué hablar, pues a su corta edad, 22 años, ya es un volante experimentado del Atletic de Bilbao con 22 partidos internacionales, en los que ha brillado con clase. Así pues, todo hace prever que esta décima edición de la Eurocopa _la primera se realizó en 1960_ pasará a la historia como una de las mejores. De antemano ya cuenta con algunos elementos que la harán inolvidable: la muerte súbita o el gol de oro como lo llaman en Europa, por ejemplo. Por primera vez en competencia oficial y a partir de cuartos de final los encuentros que acaben en empate disputarán una prórroga de 30 minutos que finalizará automáticamente cuando uno de los dos equipos convierta un gol. En caso de persistir el empate, el juego se definiría por disparos desde el punto penal. Por ahora y durante las próximas tres semanas, lo único que hará el mundo del fútbol será disfrutar de los goles que inflarán las redes de los arcos y de la magia de las jugadas de las principales estrellas de este deporte en las canchas inglesas, que serán por unos días la meca del fútbol y testigos de excepción de una fiesta tan sólo comparable con un mundial.