A lo grande

La semana pasada, horas antes del crucial partido entre la selección de fútbol de Brasil frente a Argentina, la prensa brasileña se desentendió un poco del scratch y prefirió dedicarle páginas enteras a Gustavo Kuerten, el nuevo ídolo nacional. Su paso a cuartos de final en el US Open después de vencer en tres sets al español Albert Costa fue resaltado por los principales diarios de ese país por encima de las noticias que pudiera generar el eterno duelo futbolístico ante los argentinos.

Ni siquiera la necesidad de un buen resultado en Buenos Aires en medio de unas eliminatorias plagadas de críticas contra la selección llamó tanto la atención como el seguimiento de los triunfos de Kuerten en Nueva York. La prensa le dio prioridad a las posibilidades de ‘Guga’ ante Kafelnikov en cuartos de final más que a lo que pudiera suceder ante el poderoso equipo dirigido por Marcelo Bielsa.

Y no es para menos. Muy pocos tenistas latinoamericanos se han dado el lujo de convertirse en el número uno del tenis mundial. La temporada pasada ‘Guga’ terminó como el mejor tenista de la ATP y este año está muy cerca de repetir la hazaña. Ha ganado seis títulos de los 16 que ha obtenido en toda su carrera, incluido su tercer Roland Garros, después de vencer en la final al español Alex Corretja. ‘Guga’, sin contar el US Open, guarda un récord impresionante: de 64 partidos disputados por torneo ganó 55 y sólo perdió nueve, cifra muy alta si se tiene en cuenta que un tenista como Sampras ha ganado en esta temporada 27 juegos y ha perdido 14.

El mito de que Kuerten sólo se desempeña bien en canchas de polvo de ladrillo también cayó hace rato. Desde el título que obtuvo en el Master de Lisboa el año pasado, tras derrotar en una misma semana a Sampras, Agassi y Kafelnikov, el brasileño ha demostrado su notable mejoría. Hace un mes repitió su título en el torneo de Cincinnati, que se juega en pista rápida, sobrepasando en la final al australiano Patrick Rafter, un especialista en estas superficies. Además su presentación en el US Open ya no deja dudas de su excelente momento.

Con su entrenador, Larry Passos, quien lo ha guiado desde que tenía 8 años, ha trabajado muy fuerte durante este año para subir el nivel en este tipo de canchas. Su revés a una mano es considerado el mejor de todo el circuito y su servicio ha aumentado la efectividad notoriamente. Incluso en su juego en tercera ronda frente al bielorruso Max Mirnyi consiguió 20 aces, algo poco común en él. Precisamente este enfrentamiento fue considerado el mejor partido del último Grand Slam de la temporada y Kuerten demostró que podía aspirar al título. Grandes favoritos y siembras importantes del torneo, como Patrick Rafter, Juan Carlos Ferrero, Sebastian Grosjean, Tim Henman, Goran Ivanisevic, Roger Federer y Alex Corretja se quedaron a mitad de camino, mientras que el brasileño superó todas las expectativas.



Kuerten, el ejemplo

Lo hecho por Kuerten es impresionante. En medio de un circuito cada vez más difícil ha sabido mantenerse. “La gran ventaja de él es que es uno de los jugadores más tácticos de la ATP. Mientras muchos competidores recurren siempre a una misma jugada, Guga varía su juego y cuando se para en el fondo de la cancha es casi insuperable”, comentó Larry Passos luego del partido de Kuerten ante Costa el martes pasado.

No es fácil para un latinoamericano ocupar una posición tan privilegiada. A pesar del buen momento de los argentinos sólo Guillermo Cañas ha logrado colarse dentro de los 20 primeros lugares. Guillermo Coria, Gastón Gaudio, Franco Squilari y ahora Mariano Zabaleta, después de su excelente presentación en el US Open, se mantienen en la lista de los mejores 50 pero ninguno se ha dado el lujo de llegar al número uno. El ecuatoriano Nicolás Lapenti y los chilenos Marcelo Ríos y Nicolás Massu han tenido una buena temporada pero no como la de ‘Guga’.

Kuerten es el nuevo ídolo de Brasil y su vida ha sido todo un ejemplo para los jóvenes. Cada vez que puede menciona y recuerda a su padre, también tenista, quien murió de un infarto, cuando él tenía 8 años, en el mismo club en el que ‘Guga’ surgió como tenista. Cada partido es un homenaje a su hermano menor, quien sufre un retraso mental. Y también como un gesto de amor por su hermano ha dado un apoyo económico total a una asociación de minusválidos en Brasil. En lo deportivo también ha sido un modelo de profesionalismo. No en vano lo primero que hizo el director técnico de la selección de fútbol, Luis Felipe Scolari, una vez asumió su cargo hace dos meses, fue invitar a Kuerten a la concentración para contagiar a sus pupilos de la mentalidad ganadora del tenista.

‘Guga’ encarna la renovación del tenis pero también es un ejemplo de que los latinoamericanos, si quieren, pueden llegar lejos en un deporte que sólo parecía destinado a deportistas de las grandes potencias del mundo.