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| Foto: EFE

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Millonarios comenzó la Liga con derrota en El Campín

Ante más de quince mil aficionados, y a pesar de irse en ventaja en el primer tiempo, los embajadores comenzaron con derrota 1-2 ante el Medellín su nueva historia en el campeonato colombiano.

5 de febrero de 2017

A Millonarios le auguraron un papelón en Curitiba, Brasil, cuando enfrentó al Paranaense por Copa Libertadores, el pasado miércoles. Contra todo pronóstico, el renovado equipo dirigido por el argentino Miguel Ángel Russo ilusionó tanto a sus hinchas, y dejó buena impresión en la crítica especializada, que a pesar de la derrota por la mínima diferencia, al estadio El Campín llegaron más de quince mil seguidores para la presentación del conjunto embajador.

En frente, Millonarios tenía un hueso duro de roer. Deportivo Independiente Medellín, uno de los equipos que más le ha amargado la vida a los azules en toda la historia, quiso ser fiel al libreto. Y lo que parecía ser una fiesta de la fanaticada azul, empezó a ser una película de terror. El equipo paisa era el que tenía el balón y el que tuvo las primeras posibilidades de marcar el primer gol. Un cobro de tiro libre de Juan Fernando Quintero pasó acariciando el vertical.

Cuando mejor jugaba el Medellín, Millonarios reaccionó y golpeó el arco rival. Elíser Quiñónez, una de las nuevas contrataciones, disparó de media distancia e hizo volar al arquero David González, y antes de terminar el primer tiempo, el mismo Quiñónez marcó el primer gol tras una bonita jugada colectiva.

El segundo tiempo parecía ser favorable a Millonarios. Pero cuando más confianza se tenía en la cancha al equipo de Miguel Angel Russo pareció caerle una maldición. Fue expulsado Figueroa, zaguero central que también debutaba con la camiseta azul. Con un hombre menos los embajadores fueron un manojo de nervios. Tanto, que en cuestión de tres minutos, Medellín encontró la victoria. Cristian Marrugo, tras cabecear un balón disparado desde el tiro de esquina por Juan Fernando Quintero, venció al portero Nicolás Vikonis que hasta ese momento había sostenido la victoria parcial. Y Juan Fernando Caicedo, tras otro gran pase de Quintero, marcó el 1-2 definitivo.

El resultado fue como un baldado de agua fría para los aficionados que esperaban comenzar con pie derecho el campeonato del 2017. Pero salieron con la mente puesta en el miércoles, en la revancha contra el Paranaense, en El Campín. Los azules están obligados a marcar dos goles para seguir vivos en su intención de participar en la Copa Libertadores.