Qué pasaría con el Barcelona en una Cataluña independiente

A continuación, hablaban los protagonistas de ese "último clásico": Ronaldo, sin atisbo de modestia, recordaba que lo mejor fueron sus dos goles y un Messi embebido de espíritu nacionalista citaba al escritor Manuel Vázquez Montalbán: "El Barça es el ejército sin armas de Cataluña".

La situación es obviamente irreal, pero para muchos aficionados al fútbol los dilemas que plantea no lo son.

El Barça no está ajeno a los temas que agitan a la sociedad catalana.

"Aunque no es un actor político, comparte el ADN de Cataluña como nación", comenta Carles Vilarrubí, vicepresidente del área institucional del club.

Y ahora que la apuesta independentista se ha situado en el centro del debate de las elecciones regionales que se celebran en Cataluña este domingo, el futuro del club en un hipotético estado independiente genera una serie de dudas y especulaciones.
 
¿Afectaría una eventual independencia de Cataluña al Barça?
 
"Le afectaría muchísimo. Desde el punto de vista futbolístico, el Barça se jugaría su existencia como gran club. Mirando a países como las exrepúblicas soviéticas, exyugoslavas o Checoslovaquia te das cuenta de que los equipos como el Estrella Roja de Belgrado o el Dínamo de Zagreb, ya no son tan fuertes. ¿Por qué? Porque antes participaban en una liga más fuerte", le dice a BBC Mundo el periodista deportivo Enric Bañeres, colaborador del diario El Mundo Deportivo de Barcelona.

Desde el club, la visión es menos dramática.

"No, no afectaría. El Barça siempre estará al lado del pueblo catalán y de sus socios, que son sus propietarios. Nunca nos divorciaremos de eso. Lo demás son temas políticos. Pero nos tendremos que adaptar", apunta Vilarrubí.
 
¿Tendría que salir el Barça de la liga española?
 
El reglamento de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el organismo que organiza la liga española, establece que "los clubes que deseen participar en competiciones oficiales deberán estar afiliados a la RFEF o integrados en ésta".

Por tanto, con la normativa actual, el Barça sólo podría seguir en La Liga si continuara perteneciendo a la RFEF.

Sin embargo, sería probable que una hipotética Cataluña independiente quisiera tener una selección nacional propia que pudiera participar en competiciones internacionales como el Mundial o la Eurocopa.

Para ello, Cataluña debería organizar su propia liga y, llegado ese caso, el Barça debería elegir entre estar inscrito en la RFEF o en la Federación Catalana.

Dicho de otro modo, el Barça debería elegir entre participar en la liga española o en la liga catalana.

"La alternativa más razonable sería que Cataluña tuviera su propia liga y que el Barça jugara en ella", dice Bañeres.

Desde el club, la respuesta es menos rotunda.

"Saber en qué liga jugará es un tema menor. Es circunstancial", comenta Vilarrubí.
BBC Mundo intentó obtener el punto de vista de la RFRF, pero su director de comunicación, Antonio Bustillo, indicó que no están haciendo declaraciones "sobre este tema".
 
¿Hay clubes que participan en ligas "extranjeras"?
 
El actual presidente del club, Sandro Rosell, ha manifestado que el Barça seguiría compitiendo en La Liga y citó como modelo al Mónaco, que participa en la liga francesa pese a ser de un estado independiente.

"Mónaco es muy distinto porque es una ciudad, no un país. Jurídicamente es un estado independiente, pero no tiene selección nacional, por ejemplo", apunta Bañeres.
Otro caso que podría servir de antecedente es el de Andorra, que pese a ser un estado independiente y tener una selección propia, tiene un equipo –el Andorra FC- que compite en la liga española.

Sin embargo, el Andorra FC está inscrito en la RFEF, no en la Federación Andorrana de Fútbol, y a cambio de jugar en la liga española renuncia a participar en la andorrana.

Un caso diferente es el de algunos equipos galeses -entre ellos el Swansea y el Cardiff- que juegan en el fútbol profesional inglés, pese a que su país de origen tiene una selección nacional.

Esto se debe a que cuando estos equipos fueron fundados a principios del siglo XX no existía fútbol organizado en Gales.
 
¿Un Barça en la liga francesa? ¿Ibérica? ¿Europea?
 
"El FC Barcelona es un club deseado por todas las ligas del mundo. Yo creo que el Barça jugaría la liga que más le conviniera", afirma a BBC Mundo Joan Laporta, expresidente del FC Barcelona y actualmente diputado en el parlamento catalán por la formación independentista Democràcia Catalana.

"Se puede estar participando en una liga de estados ibéricos, o en otra liga que no sea la nuestra", agrega.

Sin embargo, estas posibilidades no serían automáticas y, señalan algunos, dejarían el balón en terreno ajeno.

"Todo eso no dependería de lo que quisiera el Barça, sino de lo que quisieran los demás. Siempre sería un equipo invitado", apunta Bañeres, quien cree que la opción más probable sería la creación de una liga catalana en la que el FC Barcelona sería el club dominante.

"Yo me rijo por lo que se ha aplicado en los países que han ido surgiendo del desmembramiento de los demás: todos tienen su selección, su liga, y los que tenían grandes equipos han bajado de nivel".

Vilarrubí apunta a una liga europea, respaldada por algunos de los principales clubes europeos, como una salida posible.

"En cualquier caso, el Barça seguirá siendo un actor importante. Tanto el Barça como el Madrid comparten la tesis de una liga europea. La Champions será más potente y habrá que redimensionar las ligas nacionales", comenta Vilarrubí.
 
¿Qué pasaría con los clásicos?
 
Para muchos, el Real Madrid y el FC Barcelona son la cara y la cruz de una moneda que, sin uno de los dos elementos, pierde su valor.

Ambos clubes son el primero y el segundo con más ingresos del mundo según la consultora Deloitte, con US$479 US$450 millones anuales respectivamente.

Se estima que cada clásico es visto por cerca de 400 millones de espectadores en todo el mundo.

"La gracia del Barça es el Real Madrid. Y al revés. No es la liga española. La liga es la guarnición del entrecot", en palabras de Bañeres.

"Yo creo que el clásico es en beneficio de las dos partes", dice Laporta.

Por este motivo, quizá, son pocos los que se atreven a dudar de la continuidad de los clásicos.