Varias figuras aspiran al trono de James

James Rodríguez se encargó de anotar en su último juego en Brasil 2014 y elevó su total de goles a seis –solo el último de penal-, pero también tiene a su haber dos asistencias. Sus perseguidores inmediatos en términos de goles son Lionel Messi de Argentina y Thomas Müller de Alemania, que contabilizan cuatro. Si bien llevan dos fechas sin anotar, se hicieron presentes en el juego de octavos de final de sus selecciones con pases de gol definitivos. No obstante, con solo pases de gol será difícil arrebatarle el título de jugador más valioso, y el de la Bota de Oro del torneo al colombiano.

Se necesitan goles y en momentos importantes para lograrlo. Vienen las semifinales y la final, el marco perfecto para goles de trascendencia.

Son cuatro los nombres que pueden hacer una diferencia en estas dos últimas fechas como para tumbar a James de la cima: son Lionel Messi, Thomas Müller, Arjen Robben y David Luiz. Messi y Robben se anularán en semifinales, no pueden seguir en camino hasta la final, pero igual tienen dos partidos garantizados, ganen o pierdan en la semifinal. Igual suerte correrán Müller y David Luiz.

Al argentino del Barcelona le basta con anotar dos goles para igualar al colombiano en el tope de la tabla de goleadores, y necesita una asistencia para igualarlo en ese rubro, por lo cual posiblemente se le nombraría el más valioso si anota dos goles más, así su equipo no gane el título, pero más todavía si lo llega a hacer. Si anota tres veces entre semifinales y fecha final, no habrá duda de que sería el rey. El próximo escaño lo enfrenta a una defensa holandesa que ha sido vulnerada pocas veces (4) y al portero Cillesen, que ha lucido bien y solo concede goles de buena factura. Pero Messi sabe de eso, así que todo es posible.

Robben y Van Persie tienen ambos tres goles, por lo que necesitan un juego del corte del Holanda-España, en el que cada uno facturó dos anotaciones, para aspirar a treparse en la tabla de anotadores. La defensa argentina se vio más sólida que de costumbre contra una Bélgica sin mayor idea, ¿será factible un racimo de goles holandeses? Difícil, sin duda, pero lejos de imposible.

Thomas Müller tiene dos asistencias y suma cuatro goles, está quizás un grado por encima de sus competidores cercanos, astro argentino por sus dos asistencias. Si anota dos goles empatará a James, si esos goles lo llevan a una final y a un título, no habrá duda de quién será el rey, uno alemán, uno que contabilizaría once goles –si anota dos, o más si anota más- en mundiales y se ubicaría a solo cuatro del récord histórico que hoy ostentan Ronaldo y Klose con 15. Esto a sus 24 años.

Vale anotar que si bien no se puede elevar la valía de un jugador por lo que haga en el partido -casi amistoso- que decide el tercer puesto, su resultado sí incide en la tabla de goleo.

David Luiz no compite con goles, no a menos que se acostumbre a meter esos tiros libres de tal irreverencia. Pero entra en la discusión por mejor jugador del índice Castrol. El central, antes del Chelsea y ahora del PSG, tiene a su favor que incluso antes de medirse contra Colombia, ya el índice lo unbicaba por encima del 10 colombiano. Es entonces casi imposible que después de una jornada en la que ambos anotaron goles, pero el del brasileño hizo la diferencia en el triunfo, que el colombiano supere al brasilero en el índice de medición de impacto de FIFA. Así pues, esa batalla está perdida. Pero no la de los goles, no la de importancia ni la de la recordación máxima.

Queda mucho por jugar, y una de las dudas a resolver en la cancha será esta, ¿puede alguien destronar al Rey transitorio, James Rodríguez?