Supermán López salvó la contrarreloj de la Vuelta

Este martes de disputó la contrarreloj individual de La Vuelta a España en la que Chris Froome amplió su liderato imponiéndose en el recorrido de  40,2 km desde el circuito automovilístico de Navarra hasta Logroño con un tiempo de 47’0’’.

En la jornada, que se sabía no iba a ser fácil para los colombianos, trajo buenas noticias para Miguel Ángel López que fue 22 en la etapa a 2’34’’ de Froome  y logró mantener su sexto puesto en la clasificación general.

Además, Supermán tuvo mejor tiempo que su compañero de equipo Fabio Aru y se confirma como líder del equipo Astana para la carrera pues se ha mostrado muy superior al italiano en la montaña y con el resultado de la contrarreloj la escuadra kazaja pondrá todos sus esfuerzos en colaborar con el colombiano.

El que sufrió en el día fue Esteban Chaves que cayó del quinto al noveno lugar perdiendo más de 4 minutos en el tipo de etapa que más le cuesta por su estatura y peso. Ahora deberá atacar en la montaña para recuperar lo perdido en esta jornada de sufrimiento.

Ahora Froome aventaja a Vincenzo Nibali con 1’58’’ y poco a poco se acerca a su meta conseguir lo que nadie ha logrado: ganar el Tour y la Vuelta en el mismo año, algo que solo dos corredores ha logrado pero nadie ha alcanzado desde que la Vuelta cambió de fecha para disputar en agosto en vez de mayo.

En la jornada brillaron los candidatos a la contrarreloj general. Wilco Kelderman estuvo por detrás del líder del Sky por 00’29’’ y se quedó con el segundo lugar de la etapa con lo que regresa al podio de la carrera.

Otro que tuvo un excelente rendimiento fue el español Alberto Contador que entró al top 5 de la Vuelta en el día de su última contrarreloj. El Chaval de pinto se jugará todo en la montaña que queda para lograr el podio en su despedida del ciclismo.

El miércoles la carrera tendrá un giro de 180 grados y la montaña volverá a ser protagonista con la etapa 16 que finalizará en el Alto de los Machucos que tiene rampas hasta del 30%, un verdadero muro en el que los colombianos pueden presentar un ataque con el objetivo de subir en la clasificación general o sumar una nueva victoria para el país.