Adiós a Michelín

La entrada masiva de llantas procedentes de China a precios muy bajos, la revaluación del peso y la desaceleración internacional fueron las causas principales para que la compañía francesa productora de las llantas Michelín, en el país desde 1992, anunciara el cierre de sus operaciones en Colombia. La noticia causó un gran impacto en el sector si se tiene en cuenta que Michelin no es solo uno de los principales productores de llantas en el mundo sino que, además, había adquirido hace 15 años a Icollantas, una empresa de capital colombiano y estadounidense. 

Con esta decisión quedarán vacantes 460 trabajadores y solo conservarán sus puestos 60 empleados que se dedicarán a atender una red de distribuidores. En los últimos años la compañía había acumulado pérdidas por 300.000 millones de pesos y a pesar de las inversiones millonarias que realizó no logró competir con los productos importados. La Asociación Colombiana de Fabricantes de Autopartes (Acolfa) lanzó un llamado de alerta al gobierno nacional para que tome medidas y evite la llegada de productos con precios muy bajos, que son una competencia desleal para los productores nacionales. Aseguran que en este sector está pasando algo similar a lo que se presenta con algunas empresas de textiles y calzado, que han tenido que cerrar ante la llegada masiva de productos chinos.